Noah siempre se había sentido solo, apartado de la sociedad por ser un omega masculino, su tío siempre lo odio y no dudo en demostrárselo, su madre supuestamente se fue con su amante alfa y lo dejó con él.
Noah siempre creyó esa historia y llegó a...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Noah se fue unos días con Joe, el omega quería celebrar el año que llevaban saliendo, así que fue a la casa del beta. Jay y Taku se quedaron solos en casa, después de casi un año, no había ningún diablillo desmontado lo que acababan de arreglar, Jay se sentía extraño, se había acostumbrado a esa vida y ni cuenta se había dado.
-Mi amor...- Taku abrazó a Jay, por la espalda, él también se sentía extraño- ¿Te encuentras bien? – el beta asintió y sujeto la mano del alfa- ¿Quieres que llame a Noah?
-Confió en ese doctor, mi hermanito y los pequeños diablillos están en buenas manos...- la amistad de ambos se había vuelto más fuerte, después del accidente con Nathaniel- Ese beta puede cuidar de ellos.
Se sentaron en el sofá, para ver una película, pero se estaban aburriendo, el beta estaría riñendo a Tyrion por dejar los juguetes en medio y Taku intentado atrapar a Skyler para dárselo a Noah.
-Me aburro...- Jay empezó a frotar la pierna de Taku, para provocarlo, el alfa lo miraba de reojo- La película es muy aburrida, bombón – se sonrojo, le había pedido que dejará de llamarlo así, Jay lo hacía para avergonzarlo- Podemos ir a dormir y dejar la puerta abierta, estamos solitos.
Taku cargo a Jay en brazos y lo llevo hasta la cama, el beta se relamía los labios, podía provocar al alfa con demasiada facilidad, intento quitarle los pantalones, pero Taku le ato los brazos, no entendía porque lo hacía.
-Estoy enfadado contigo, pequeño beta...- apretó lo sufriente el cinturón, para que Jay no pudiera soltarse, pero sin hacerle daño- Tengo que castigarte – el beta lo miro pícaro.
-¿Qué he hecho? Soy un pequeño beta inocente...- intento sonar dulce, mientras mordía la oreja del alfa- Me he portado bien.
-Está mañana...- le recrimino, mientras le quitaba los pantalones, el beta se estaba excitando- Cuando te has despertado, te has olvidado de una pequeña cosita, mi amor...
-Lo he hecho todo ¿no? – Taku golpeo el trasero de Jay y este sonrió- Tenía que despertarme antes, para ayudar a Noah a prepararse.
-Todas las mañanas, me das dos besos de buenos días...- parecía muy indignado, Jay tuvo que aguantarse la risa- Y no me has dado ninguno, pequeño beta.
-Lo siento, me olvide...- el beta toca el pene del alfa con el pie y él jadeo- ¿Vas a ser muy duro con el castigo? – Taku asintió- Ten piedad de mí, bombón.
Taku masajeo los pezones de Jay, haciendo que temblara y luego bajo sus manos hasta su abdomen, el beta tenía cosquillas y no paraba de reír, el alfa lo miraba con seriedad, estaba intentado concentrarse, pero no le dejaba.
-¿Qué estás haciendo?- obligo a Jay a darse la vuelta y empezó a besarlo por la espalda, hasta llegar a su pompis- No puedo verte, Taku.
-Tu castigo, está empezando, no puedes hablar, Jay...- apoyo el pecho del beta con cuidado, sobre las sabanas e introdujo dos dedos en el interior de él, Jay gimió al notarlo- Eres un beta muy malo...- golpeo la nalga de Jay con fuerza, a él le gustaba que Taku hiciera eso, pero el alfa se estaba preocupando por él- ¿Te he hecho daño?- negó con la cabeza y subió un poco más su trasero- No me sigas provocando, Jay.
Jay arqueaba su espalda cada vez que Taku introducía un dedo más, el alfa lo levanto de las sabanas y le obligo a apoyar espalda en su pecho, mientras sacaba los dedos, ya se había puesto el condón, el beta se asustó cuando noto el miembro del alfa dentro de él.
-No puedes hablar aún...- nunca habían estado en esa posición a Jay le sorprendió un poco- Tu castigo sigue...- puso un dedo sobre el glande del beta y él intento huir- No puedes venirte hasta que yo te deje, Jay.
-¡Ah!...- era lo único que podía decir, Taku lo beso para que no pudiera hablar, mientras lo embestía poco a poco, Jay pensaba que su pene iba a estalla- ¡Ah! ¡Ah!
Taku iba con cuidado, para no hacerle daño, pero a Jay le daba igual, le gustaba lo que estaba haciendo el alfa, estaba pensado en dejarlo sin besos de buenos días más seguido, si le iba a hacer eso siempre, se olvidaría de ellos, algunas mañanas.
Jay cayó sobre su pecho, mientras Taku seguía embistiendo, hacía tiempo que había dejado de sentir su parte baja, ambos gemían a la vez, el alfa libero el pene del beta y se vinieron los dos a la vez, se sintió satisfactorio, quería volverlo a hacer pero Jay se había dado la vuelta, para besarlo.
-Nunca has hecho esto, Taku...- seguía con las manos atadas, era algo molesto, quería tumbar al alfa en la cama- Hazlo de nuevo...
-¿Estás bien? – puso su mano, sobre el vientre de Jay, preocupado- No te duele ¿verdad?
-Solo dolió al principio, pero luego sentí placer...- beso de nuevo al alfa- Otra vez, bombón...- puso su pie sobre el pene de Taku, de nuevo- Puedes hacerlo las veces que quieras, vuelve a castigarme – negó con cabeza- Vamos, mi bailarín – se sonrojo.
-¿Puedes hacérmelo tú? Por favor...- desato a Jay, mientras hablaba con timidez- Quiero saber cómo se siente, en esa posición, mi amor – sus mejillas estaban completamente rojas.
El beta se vengó de Taku, el alfa sufrió la ira de su pequeño beta, de nuevo, a él no le hizo falta atarlo, Jay le prohibió venirse hasta que él lo hiciera, pero no cubrió el glande de Taku, el alfa se estaba aguantado como podía, mientras el beta lo embestía y jugaba con sus pezones, le pidió clemencia, pero Jay hizo como si no le escuchará.
Al cabo de una hora, el beta se detuvo y abrazó al alfa, ambos estaban agotados, así que decidieron no moverse por un tiempo, aunque Jay seguía jugando con los pezones de Taku, él no tenía fuerza para hacerlo de nuevo.
-¿Te gustan? – Jay le sonrió, mientras él le acariciaba el cabello- Me duele, mi amor...- el beta le hizo un pequeño gruñido- ¿Estás imitando a Sky? – asintió- Ahora quieres ser un bebé como él – se acurruco sobre su pecho y sonrió.
Dejo que Taku lo cubriera con un gran abrazó y se durmió en sus brazos, el alfa intentaba no moverse para no molestarlo, Jay estaba comiendo bastante esos días, ya que Joe, dijo que era bueno para empezar el tratamiento, debía engordar un poco, al alfa le gustaba jugar con sus mejillas y cuando Jay le dejaba, también con la grasita de la barriga, minutos después, el beta se indignaba e iba a jugar con Tyrion.
-El lunes, es la primera prueba, estoy asustado...- le decía mientras se sentaba en el sofá- Puedes hacerte tú la analítica primero, por favor...- lo miro con demasiada tristeza- Luego me abrazas con mucha fuerza, para que no pueda irme, pero no dejes que el doctor Ross se vengué de mí.
-Yo te cuidaré, mi pequeño beta...- beso su frente.
-----
Taku está preocupado por Jay, le ha preguntado varias veces si está seguro de hacer el tratamiento, a él no le importaría adoptar a un niño, si Jay viera que no pudiera, pero el beta quiere intentarlo, al menos una vez antes de rendirse, está tomando todas la precauciones necesarias, incluso ha dejado de comer picante, algo que le ha costado bastante. Noah le ha pegado su adicción por los dulces y Tyrion le ha ayudado.
Joe esta asustado, sabe que si hace algo mal puede ser peligroso para Jay, el doctor Ross ha investigado todo a fondo, antes de empezar, incluso le ha pedido ayuda a Sue por si hay cambios, le ha preguntado a Jay si está seguro varias veces, odiaría causarle un daño permanente a su amigo.
Hora de preguntas:
¿Joe se vengará de Jay? (Aunque sea un poquito) Su venganza empezó hace unas semanas, cuando le prohibió el picante a Jay, pero solo hizo eso.
Taku cuida mucho de los pequeños ¿Sus mimos serán demasiado para Jay? O él se aprovechará de la situación.
Espero que os haya gustado :) (Me gustaría saber si tenéis alguna sobre la historia, me dejaron un comentario diciendo que no he explicado bien lo que está pasando)
