Armando caminaba de un lado a otro con los documentos en sus manos y se rascaba la nuca. Está muy nervioso.
Una Beatríz bastante molesta irrumpió al departamento que compartían Armando, Mario y Nicolás.
—¿Dónde está él?— Nicolás miró a Mario y ambos señalaron su habitación sin decir una palabra.
No podrían bromear cuando Betty venía con esa cara y humor que parecía despedir relámpagos de su cabello crespo.
—¿Cuándo pensabas decirme?— Betty regaño a Armando que estaba parado boquiabierto de verla ahí.
—¡Les dije específicamente que no le dijeran!— Señaló al par que asomaba las cabezas por la puerta de la habitación.
—¡Ella da miedo y lo sabes Mendoza!— Gritó Mario en su defensa y escondiéndose detrás la pared después de la mirada fulminante de Beatríz.
—Es... bastante persuasiva.— Dijo Nicolás con vergüenza.
—Tontos.— Respondió Mendoza frustrado. Miró hacía la pequeña mujer que estaba frente a él, su cabello crespo en todas direcciones, su ceño fruncido y sus brazos cruzados sobre su pecho.— No quería preocuparte, Betty.— Explicó con calma pero no resolvió la rabia de ella.
—¿Sin decirme? ¿Esa es tu solución para no preocuparse? Somos amigos.— Recriminó.— Es obvio que no quieres irte ¿Porque empacas?— Señaló el desastre de la valija y la ropa sin doblar.
—Betty-
—No me llames así, estoy molesta contigo.— Apretó más su brazos.
Mario y Nicolás rieron.— Ustedes dos, no veo que pienses en una solución para esto.— Sus risas pararon.
—Perdón Bet- Beatríz.— Dijo Nicolás y jaló a Mario del cuello.
— Beatríz, estamos hablando de migración debo volver, mi visa a expirado.— Explico con la misma calma.
—Bien, entones.— Se movió de un lado a otro y lo miró a los ojos.— Cásate conmigo.— Dijo finalmente y son titubear.
Armando tartamudeo y aquel par volvió a aparecer en la habitación.
—¿Que?— Gritó Mario más agudo de lo normal.
—Creo- creo que Beatríz acaba de pedirme matrimonio- Dijo aún luchando con la fluidez de su voz.
—Pero- ¡Betty! No puede hacer eso.— Dijo Nicolás acercándose a ella.
—Por supuesto que puedo.— Respondió obstinadamente.— No veo otra solución, claramente ustedes no se casarán con él.— Dijo con burla.
—¡Absolutamente, no!— Gritaron ambos.
—Bien, está hecho.— Su sonrisa era triunfante.
—Pero a ver, ¿Cómo harán esto? Deben conocerse perfectamente bien.— Dijo Mario acercando a la pareja y pasando sus brazos por sus hombros.— Y hablo de la intimidad.— Culminó con una sonrisa pícara.
—¿Qué?— Dijo Armando alarmado.
—Es cierto. ¿Cuando fué la última vez que Betty tuvo relaciones sexuales?— Preguntó Mario.
—Yo- no lo sé -— Armando tartamudeo una vez más.
—Muy mal, yo recuerdo perfectamente cuando fué.— Sonrió.
—¿Y usted cómo es que sabe eso?—Pregunto Nicolás.
—Hablo de mi, bobo.— Respondió.
—¿Sabe si está circunsidado?— Fué el turno de Nicolás.
—¡Nicolás!— Armando ahora todo color rojo intenso del cuello a la punta de las orejas.
—¡Debemos saber que estaran preparados para este tipo de preguntas!—Se defendió Mario.
—Bien, bien, suficiente podemos ponernos al tanto con esa información.— Resolvió Betty saliéndose del brazo de Mario.
—Pe-ro Beatríz.— Armando la siguió. —¿Cómo pretende que hagamos esto?— Su voz salió más alarmanda de lo usual y ella se burló.
—De la manera antigua.— Contestó y el par de bobos miraron con ojos abiertos y sonrisas pícaras mientras Armando luchaba con el sonrojo y vergüenza.— Hablándolo obviamente ¿Que pensaste Armando?— Ella rió y se despidió de los chicos saliendo del departamento.
Nicolás y Mario se acercaron a Armando que estaba petrificado al suelo y palmearon su espalda.
—Hermano, esa mujer está decidida.— Armando asintió lentamente.
Pensando en todo lo que acaba de pasar y lo único que podía procesar es que se iba a casarse con su mejor amiga.
Hello There.
Prometo calmarme con los OS xd
¿Habrá continuación? No séxdd
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One Shot's los que guste y mande.
FanfictionSon historias cortas, variadas de cualquier categoría. Ninguna tiene continuación u orden en específico. A darnos vuelo.