50 Demonios escondidos del señor Sesshomaru (Completa)

Persiste el enojo

Hoy me dedico este capítulo, suena algo ridículo, pero es mi cumpleaños. Debo regalarme algo que escriba. Así que ¡Feliz cumpleaños #29 Nia! Se que te quedaste con las ganas de invitar a Wilfrido pero debes conservar la poca dignidad que te queda porque sabes perfectamente que no  vendría y ni siquiera te daría una felicitación por Facebook. Pero los buenos regalos por parte de tu familia nunca faltan.

Capítulo 144:

Estas dos semanas han sido algo difíciles para todos. Porque aún persiste el enojo y ninguno de los cuatro pone de su parte para solucionarlo. Creo que todos tenemos un orgullo de perros.

He hablado muy poco con Sesshomaru y la mayoría de las veces es forzado a hacerlo. Mi suegra definitivamente está furiosa a tal grado que ni siquiera un "hola o buenos días" me ha dicho. No me dirige la palabra y solo me observa como si vigilará que como o duermo bien. El nieto le preocupa y a mí me tiene sin cuidado. El único que me habla un poco mejor es mi tío y se ha preocupado por mi pues tiene miedo, que todo se vaya a la mierda, y no es para menos, mi esposo no sabe sobre la violación y puede tal vez dudar de ello si se lo explico, no pienso hacerlo. El trabajo en el orfanato es algo aburrido, sólo me tienen en el miserable archivero, arreglando papeles desde cero. Es cansado.

No puedo ver a Rin es más ni siquiera he podido por la carga de trabajo que esto me está implicando a tal grado que no quiero trabajar pero esta responsabilidad yo misma la busque y debo salir de ella.

En una que otra ocasión me he topado con Sango y el odio se desborda a kilómetros de distancia. No sabe de mi embarazo y por el momento es lo mejor, la panza no se me nota es como si tuviera colitis pero un día de estos se lo soltaré para que pueda cayar el osico que posee y difuminar esa sonrisa burlona que lleva en el rostro. Claramente se ha percatado que vengo y me voy en taxi, que no he recibido llamadas y que estoy sola en esto  tan complejo. Sin embargo me vale madres.

Sesshomaru me buscará tarde o temprano porque ama a este hijo. «ganas me dan de darle mi panza y él lo geste, el problema no se puede». Y mi dilema con las ganas por tenerlo en frente follando es muy intenso y enfermizo. Pero cuando haya reconciliación estoy segura que habrá sexo.

Y por último está Naraku, ha venido con frecuencia al orfanato  y me ha ayudado en el trabajo aunque no tiene la necesidad de hacerlo, le he dicho que se dedique a sus asuntos sin embargo no le gustan las órdenes. No sé si sea bueno o malo.
Ya que una vez por accidente sentí su pene rosando mis nalgas y fue algo incómodo, no soy lo suficientemente alta para alcanzar algunos estantes por más que me estiraba y él me ayudó. Bajo el libro pero al momento de hacerlo se arrimo bastante. No sé si lo hizo a propósito o por accidente pero no quiero que suceda nuevamente y menos que ando más caliente de lo habitual.

A Rin he tratado de animarla cuando puedo verla en el receso me pongo a jugar con ella un rato para alegrarle la vida porque un corazón roto merece tan sólo una pizca de amor. Al menos borro su tristeza por instantes.

Mi jefa en dos ocasiones me ha regañado supuestamente porque he hecho las cosas mal cuando hago exactamente lo que me ordena y sospecho que quiere hacer que renuncie pero he sabido manejarla y además Naraku me defendió una vez y reto a su familiar diciendo que él me daba mi sueldo y que no debía quejarse que yo aprendería rápidamente. Y se lo agradezco.

Eri es buena persona por lo poco que sé y en ciertas ocasiones me habla de albur con el pene de Sesshomaru y mi vagina no sé si tomarlo con risa o enojo. Es algo extraño que una sumisa hable de esa manera de su antiguo amo.

Mi vida es extraña últimamente, no puedo quejarme.

De mi familia ni sé mucho porque he tratado de evitarlos y del que si no sé nada pero absolutamente nada es mi ex. De alguna manera estoy tranquila después de lo que me ha hecho esto es una bendición.

Me gustaría que vuelva a la normalidad pero no quiero ser yo quien solucione el problema. Sino ellos porque se enojaron injustificadamente y por una tontería. Los extraño pero tengo orgullo. Y cuando tengo ganas de sexo uso mi dedo o el dildo.

Hoy fue un día algo tedioso y muy cansado que ni siquiera he podido ver a Rin y salí más tarde de lo habitual y para el colmo de los colmos no encuentro ningún taxi y caminar de aquí a la mansión es algo lejos y peligroso. Le pedí ayuda a Naraku, sé que no es correcto pero no quiero morir en manos de un pervertido.

Me preguntó porque Sesshomaru no vino a recogerme y le tuve que mentir diciendo que tenía mucho trabajo.
La manera en como me tranquiliza es incómoda ya que colocó su mano sobre mi pierna, lo mire algo furiosa y se disculpo. Le ordené que me bajara una cuadra antes. No quiero problemas con mi esposo lo que quiero es sexo. Y me de duro por varias horas. Definitivamente estoy urgida a tal grado que quisiera meterme en su habitación y hacerle un oral.

De imaginarlo me prendo como fósforo en la estufa. Pero no lo haré, prefiero un baño y dormir. Me siento cansada. Así que me fui a la cama sin dar explicaciones de mi vida de lo que hago o no.