𝓔𝓼𝓮𝓷𝓬𝓲𝓪 𝓭𝓮 𝓵𝓪 𝓛𝓾𝓷𝓪 (𝐃𝐫𝐚𝐜𝐨 𝐌𝐚𝐥𝐟𝐨𝐲)

Capítulo 10. El Indeseable #1.

Tras unos momentos de oscuridad y sensación de asfixia, Calie se encontró en el diminuto callejón donde habían previsto llevar a cabo la primera fase del plan.

El callejón todavía estaba desierto(sólo se veían un par de cubos de basura), pues los primeros empleados del ministerio, según los chicos, no solían aparecer hasta las ocho en punto, como muy pronto.

— ¿Están listos?— preguntó Theo. Harry, Hermione y Ron asintieron—. Muy bien... porque ya no hay vuelta atrás.

Draco consultó la hora.— Tienen que llegar dentro de unos cinco minutos. En cuanto la haya aturdido, nos moveremos rápido y ninguno de ustedes se mueve de allí— indicó, con severidad.

— Theo, la puerta...— le recordó Calie, quien parecía estar muy tranquila.

— ¡Ah sí, casi se me olvida! Háganse a un lado...— sacó la varita y apuntó a la salida de incendios que tenían a un lado, cerrada con candado. Se abrió de golpe, y dejó a la vista a un oscuro pasillo que conducía, como ya sabían gracias a sus meticulosas exploraciones, a un teatro abandonado.

— Y ahora, a ponerse la capa invisible...— indicó Calie, con una sonrisa burlona. Hermione asintió, mientras Harry y Ron la miraban extrañados.

— Dijiste que no la íbamos a usar— replicó Harry.

— Sí, tiene razón— agregó Ron—. Dijiste que usaríamos el encantamiento desilusionador.

— Sí...— Calie asintió y arrugó la nariz—. Pero, cambié de opinión. Además, ustedes le tienen mucho cariño.

— Es de Harry— señaló Ron, apartándose un poco de él. Harry lo fulminó con la mirada.

— Pónganse la capa invisible y...

—... y esperamos— concluyó Ron. Le echó la capa por encima a Hermione y miró a Harry, poniendo los ojos en blanco.

— Potter...— lo llamó Draco, antes de que Ron lo cubriera con la capa también—. Tu vas con mi prometida— dijo, haciendo énfasis en las dos últimas palabras.

Calie le sonrió a Draco y luego a Harry, extendiéndole su mano. Harry pasó su mirada de Draco a Calie, y de Calie a Draco, como una pelota de pin pong. Y luego se acercó a la castaña.

— ¿Listo?— le preguntó Calie, tomándolo del antebrazo. Harry asintió mirándola a los ojos. Luego la castaña se dirigió a los demás—. Sigan las indicaciones y todo será más fácil y rápido.

— No hagan ruido— agregó Draco. Se acercó a Calie y le dio un cálido beso en los labios antes de dirigirse a la puerta junto a Theo.

— Bien, estrella. Momento de hechizarte. Y no me sueltes, ¿de acuerdo?— anunció, antes de lanzarle el encantamiento desilusionador a Harry. Volviéndolo tan invisible como si trajera puesta la capa. Luego hizo lo mismo con ella misma.— ¿Me escuchas?— susurró.

Harry no respondió y luego sintió un agudo dolor en el antebrazo. Caliope le había dado un pellizco.— ¡Ouch!— se quejó en un murmuró—. ¿Qué te pasa?

— Lo siento, no me respondiste— susurró.

— Calie, dijeron que no hiciéramos ruido— le recordó Harry.

Calie reprimió una risa— No puedo verte— comentó.

— ¿Adivina que? Yo a ti tampoco— respondió Harry, con sarcasmo. Su respuesta solo hizo que Calie no pudiera reprimir otra risa.

— ¡Shhh!— los reprendió Hermione.

— Vamos al teatro, rápido— indicó Calie, y los cuatro, sin que nadie pudiera verlos, entraron a la parte trasera del escenario. Al entrar, la castaña deshizo el encantamiento en ellos. Mientras Ron y Hermione se quitaban la capa invisible.