Caliope Avery, una brillante estudiante de Durmstrang, ve su mundo transformado al ingresar a Hogwarts. Su vida da un giro cuando tiene su primer encuentro con Harry Potter.
Entre secretos familiares ocultos, peligros y misterios revelados, Caliope...
Por la tarde, Calie y Theo se encontraban en la biblioteca, terminando unos pergaminos pendientes de Adivinación.
— ¿Ya es todo? — preguntó Theo, soltando la pluma con la que escribía.
— Sí, ya terminamos — respondió Calie, riendo al verlo cansado por escribir.
— Gracias a Merlín, en lo único que es buena esa profesora es pidiendo tareas que nunca va a leer en su vida — se quejó Theo.
— Debimos tomar Aritmancia — dijo Calie, guardando sus cosas en su bolso.
— ¿Irás con Potter? — preguntó Theo, ayudándola a doblar un pergamino.
— Sí, quedamos con Neville en el lago, está investigando unas algas o algo así — respondió Calie encogiendo los hombros.
— Ese chico es bastante raro.— haciendo una mueca— ¿Potter sigue sin hablar con Weasley? — comentó Theo, poniéndose de pie.
— Me parece... algo tierno. Extraño sí, pero es agradable, y no hablan aún, es ridículo — soltó Calie rodando los ojos, mientras avanzaban hacia la salida. — ¿Quieres venir?
— Claro, lo que más quiero en la vida es ir a ver a Neville buscar algas en el lago — le dijo Theo, poniendo su brazo sobre los hombros de Calie.
Calie solo puso los ojos en blanco y Theo soltó una carcajada.
Una vez reunidos con Harry y Neville, caminaron juntos hacia el lago negro. Al llegar, se sentaron en la orilla, charlando mientras observaban a Neville buscar plantas debajo del agua. A Calie le resultaba incómodo ver a Neville con los pies dentro del lago, así que se distraía leyéndole lo que decían sus notas mientras él recolectaba sus muestras.
— Sorprendente... Sorprendente— exclamó Neville observando una especie de alga.
— Neville, lo hiciste de nuevo— se quejó Theo mirándolo mientras jugaba con el cabello de Calie.
— Oh, lo siento...— dijo Neville nervioso.
— ¡Plantas acuáticas mágicas de los lagos!— soltó Harry leyendo uno de los libros que llevaba Neville.
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— Moody me lo dio, el día que me invitó el té— le dijo Neville.
— ¿Tomaste té con ojo loco? ¿Fue una cita? — dijo Theo, provocando las carcajadas de Harry y Calie.
Neville pareció no escuchar y miró detrás de los chicos, levantó la mano en un saludo y luego continuó con lo suyo. Al notarlo, los chicos giraron en esa dirección y se encontraron con Hermione, quien llegaba al lugar seguida por Ron y Ginny mientras se quejaba de algo.
Cuando llegaron a ellos, Harry se puso de pie mientras Calie y Theo permanecían sentados debajo del gran árbol.
— Ronald me pidió que te dijera, que Seamus le dijo que Dean le dijo a Parvati... que Hagrid te busca— dijo Hermione rápidamente.
