Verdadero amor - Jacob Black y tú

||Ella es .........||

-Adrianne? - susurre por segunda vez mientras la pelinegra avanzo un paso hacia donde yo estaba tratando de reconocer mi voz, en su mirada se notaba asombro, pero conforme me logro ver de pies a cabeza su mirada mostraba terror.

Alzo una de sus manos hacia su boca, intentando cubrir la sangre que caía por ella, pero inevitable, el lugar estaba completamente con manchas de sangre, su ropa también estaba llena de sangre, era ella, era mi mejor amiga, la reconocería si estuviera dentro de otra persona pues su mirada era la que yo siempre veía al despertar. Estaba totalmente confundida, que debía hacer, todo fue tan de repente que ni las palabras, ni los movimientos nacían de mi cuerpo. Cuando estaba a punto de dar otro paso, Adrianne me miro otra vez agachando la cabeza y en segundos desapareció de donde yo estaba.

-No!!! Espera...- grite mientras avance unos cuantos pasos, pero no había ni siquiera algún rastro de su aroma en las siguientes 10 calles, mi mente estaba confundida, de ser cierto esto, ella era un vampiro, me facilitaba las cosas a mí, pues parte mía también lo era, pero aquella escena que logre visualizar fue escalofriante, no siempre veías a tu mejor amiga arrebatándole la vida a un ser humano, esa era una de las partes que odiaba acerca del vampirismo, tener que arrebatarles la vida a inocentes. Regrese al mismo lugar en donde había estado el cuerpo y me agache a ver de nuevo al cadáver, no podía dejar un rastro así, no a mitad de una calle, coloque ambas manos sobre el cuerpo pensando en el hechizo correcto para desaparecer esto.

"Dignen igni venite"

El cuerpo ahora ardía en llamas, como también cada mancha sobre el suelo, se consumiría en poco tiempo, así que no habría en algún problema de un incendio, el único lugar al que deseaba ir era a casa, tenía la esperanza de encontrarla ahí, al menos lo suficiente para hablarlo, charlar de todo lo que había pasado, pero también imagine que no estaría en casa y efectivamente no estuvo. Mi subconsciente tenía que procesar tanto y realmente necesitaba de ella, hablarlo juntas, necesitaba a mi mejor amiga, a mi hermana que fue durante estos años.

"Señorita Cullen...puede ir a casa. El turno acabo por hoy"

Mis pensamientos se alejaron mientras escuche esas palabras, al fin podía volver a casa, por suerte en este día no hubo tantos pacientes, solo uno que otro con fractura leve, claro sin contar el apoyo que solicito el Dr. Patt para que la apoyara con una niña. Cosas así en el hospital me distraían y sobre todo me hacían pensar con claridad mientras volvía a mi reconfortante habitación, pero era lo mismo de siempre, abrir la puerta de esta y encontrar un silencio incomodo y, sobre todo, la ausencia de Adrianne, no la había visto desde aquel incidente, no sabia de ella, no tenía pistas, ni datos, nada. En su hospital reportaron que desapareció y no había vuelto. Tenía que encontrarla y no solo para solucionar todo, la extrañaba y no quería que perdiera lo que tanto le costo estudiar. Por unos segundos pensé en donde empezar a buscarla, pero no había respuesta a ello, el mundo era muy grande, podía estar en cualquier lugar, una de mis manos se aferro al collar que llevaba puesta y analice este por unos segundos, fue un regalo de ella, así como yo le regale uno....

-Mi collar......- susurre mientras cogí un mapa que tenia en mi escritorio y extenderlo en mi cama, cogí un pequeño bisturí que tenia cerca e hice un corte en la palma de mi mano para que la sangre cayera en el mapa. Podía hacer un hechizo de localización a través de mi collar, me perteneció por muchos años, estaba vinculado a mí, a mi sangre así que era algo fácil, solo esperaba que no se lo haya quitado pues eso dificultaría más las cosas.

"Anta Cotis Syrum, Anta Cotis Syrum.""

Al abrir mis ojos un circulo con mi sangre se formó sobre la palabra, ahí estaba, estaba tan cerca de aquí, así que debía irme cuanto antes y recogerla. En esta oportunidad llevaría el auto, al menos para ir rápido y que la gente no me vea extraño al correr y desaparecer, la ubicación era tan precisa, pero no era algo que al menos esperaba, se veía como un viejo edificio abandonado, no había rastros de personas cercanas ,ni siquiera casas, era un gran corral abandonado ,por edificios deshabitados, ¿Por qué ella estaba aquí?, al entrar en esta fue fácil detectar el aroma de Adrianne pues no había otro cercano, me acerque a ese aroma y divise un cuarto pequeño, este tenia una cama, solo eso, a su al redor no había nada mas que escombros. Ladrillos, palos, todos apilados alrededor de donde yacía mi mejor amiga, no tenia la apariencia de siempre, una piel mas pálida y apegada a sus pómulos se veía, ¿estaba muriendo?, ante mis llamados, nada logro despertarla por lo que la tome en brazos y saque de ahí, debía llevarla a casa, ahí estaría más cómoda y hablaríamos mejor.