Encontré lejos a Jane que me esperaba con los demás, aunque Félix no era el más feliz de todos tenía cierto de respeto hacía mí.
-¿Vendrás a Volterra? - inquirió Alec.
-No, iré en busca de Adrianne, está cerca de Washington. Quizás más adelante volvamos a Italia. - comenté.
-Aro estará feliz de recibirlas. - murmuró Félix.
-Sabes que siempre estaremos dispuestos a esperarte. - comentó Jane.
-Lose y gracias, debo irme. Cuídense y Jane.... deja de hacer maldades tuyas. - susurré.
Todos asintieron y volvieron a desaparecer, había dejado atrás a mi familia y también a los Vulturi. No podía creer que había pasado todo esto en un día, solo en horas, la situación de Jacob, la pelea Con Edward y mi familia ahí, sabiendo mi secreto. La única solución era volver a casa, a mi casa, empecé a correr ocultando parte de mi aroma y mi poder, para no ser captada por los Cullen mientras regresaba a casa, afuera de esta estaba Adrianne que esperaba por mí y extendió sus brazos hacía mí.
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-¿Qué ocurrió?. - murmuró mientras me hizo pasar.
-¿Qué pasó? - comentó Ethan.
-Adrianne.... - susurré acercándome a esta que venía en mi dirección.
Sus brazos fueron cálidos que me hicieron recordar lo que había pasado y aunque no sentía la necesidad de llorar nuevamente recordando el fatal momento que pasé, lo hice, volví a llorar. Ethan solo contemplaba la escena y para como se dice, no incomodar volvió a la casa y eso porque Adrianne por medio de una seña lo obligó, ella se sentó en la grada de la casa junto a mí, que solo podía pensar en llorar en esos momentos. No podía comprender las cosas, pues ni siquiera dije algo, pero era tan doloroso volver a imaginar aquella escena que se repetían en mi cabeza una y otra vez, ambos besándose a escasos centímetros de Edward, no solo de él, mi familia entera estaba cerca y yo. ¿Cómo pudieron hacer eso?, ¿acaso pensaron que Edward no los espiaría? Adrianne, solamente tocaba mi cabello muy suavemente mientras mis lagrimas seguían cayendo.
-Cuéntame que paso mi pequeña....- susurró.
-Sucedió otra vez Adrianne. - inquirí. - Jacob volvió a besar a Bella.
-¿Qué?.- comentó
-Tal como lo oyes, se besaron, cerca de nosotros, cerca de todos. -respondí. - Ya paso una vez Adrianne, esta es la segunda, me dolió. Creí en las palabras de Jacob, prometió no hacerlo, no sé qué paso.
-Tienes que decirme donde puedo encontrar a ese lobo. - comentó Adrianne.
-¿Qué? ¿para qué? - susurré.
-¿Cómo para qué?, nadie te hace sufrir, eso jamás lo permitiría.- inquirió Adrianne algo molesta.
-No por favor, no hagas algo, no vale la pena. - respondí. - Es mi culpa, yo creí en sus palabras otra vez...
