Cap 46 Part 3

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Una vez al llegar me dejó entrar primero, entró el y cerró la puerta, el coche comenzó andar rápidamente.

El observaba a su lado en la ventana. Llevé una mano a mi pecho y baje la vista.

Una lágrima resbaló por mi mejilla.

La limpié de inmediato y observé mi mano humedecida, sonreí con ironía.

Soy patética.

Mi corazón comenzó a latir rápidamente. Él reloj inteligente timbro anunciando mi frecuencia cardiaca. El me miró de reojo.

—¿Tienes problemas cardíacos?

Negué cubriendo los números rojos.

—¿Que es esto? ¿Quién es ella?–preguntó Taeyang mientras manejaba observándome por el retrovisor.

—Solo avanza, la policía observa–ordenó Seoyoon. Él siguió conduciendo.

—Fuera de la ciudad. Hay una cabaña donde podrías esconderte es...–cayó al verme por el retrovisor de nuevo—Lo siento, me olvidé por completo de ella–se quejó en voz baja.

Pasaron dos calles más cuando Seoyoon habló.

—Bajémosla aquí–le dijo a Taeyang, el asintió y se detuvo en la orilla de una calle donde había un callejón con poca gente.

Inquieta moví mis pies y giré a mis costados.

—Anda, sal—pidió moviendo su mano haciendo que me apartará sin girar a verme.

Indecisa y sin más opción tomé la puerta y la abrí. Me quedé callada durante segundos.

Sí Seoyoon iba con Taeyang, le pondría una trampa para que él volviera a la cárcel, entonces sería más difícil para él salir.

—Hablemos—pedí girando de nuevo a él.

—¿Nosotros?—se comporto arrogante mirando hacía el frente de brazos cruzados. Cerré mis ojos quejándome mentalmente.

Suspiré tratando de omitir su irritante comportamiento.

—Seoyoon, ven conmigo—le sugerí,—Solo quiero, una foto y un autógrafo. ¿Podríamos tomaría allí?—señalé al callejón,—¿Lo ves? No hay gente.

El frunció el ceño.

—¿Por qué querrías una foto en un momento cómo esté? ¿Estás loca? Sólo vete—intervino Taeyang.

—Tú—me dirigí a Taeyang,—Solo estoy pidiendo una fotografía. Si él no viene, les contaré a todos sobre lo que dijiste. Que eres su cómplice y que irán fuera de la ciudad—amenace,—¿Pero crees que es mucho pedir por mi silencio?

—Aún si lo dijeras, ¿tienes cómo comprobarlo?—fue irónico.

Saqué mi teléfono y le mostré la grabación.

—Una vez que obtenga mi fotografía, eliminaré la grabación—sonreí.

—Hey, tú. ¿Estas loca?—escuché decir a Taeyang con una mano en el volante girando hacía atrás.

¿Qué pasó ayer?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora