La historia del trio de oro

La advertencia de Dobby

HARRY POTTER PERTENECE A J.K.ROWLING

Quien quiere leer ahora_ pregunto el director.

Narcissa se levanto para recibir el libro.

La advertencia de Dobby_ leyó frunciendo el ceño, al igual que su hijo, ambos recordando que así se llamaba su antiguo elfo doméstico, agitaron la cabeza, debía ser otro.

Quien es Dobby_ pregunto Fleur.

Ya lo sabrán dijo Harry_ dijo Harry sonriendo al pensar en su amigo.

Harry no gritó, pero estuvo a punto. La pequeña criatura que yacía en la cama tenía unas grandes orejas, parecidas a las de un murciélago, y unos ojos verdes y saltones del tamaño de pelotas de tenis.

Un elfo domestico_ pregunto Viktor, Harry asintió.

En aquel mismo instante, Harry tuvo la certeza de que aquella cosa era lo que le había estado vigilando por la mañana desde el seto del jardín.

Lo que no entiendo es porque_ dijo Sirius confuso.

Ya verán _ dijo Harry con una pequeña sonrisa, confundiendo a varios.

Estoy empezando a odiar esa frase_ gimió Remus, todos le dieron la razón.

La criatura y él se quedaron mirando uno al otro,

Debió ser muy extraño_ dijo Susan.

Lo fue_ contesto haciendo memoria.

y Harry oyó la voz de Dudley proveniente del recibidor. —¿Me permiten sus abrigos, señor y señora Mason? Aquel pequeño ser se levantó de la cama e hizo una reverencia tan profunda que tocó la alfombra con la punta de su larga y afilada nariz.

Creo que tienes un admirador_ dijo Sirius en broma, pero se detuvo cuando el trio asintió seriamente.

Era su fan numero uno_ dijo Ron divertido ganándose una mal mirada de Harry.

Harry se dio cuenta de que iba vestido con lo que parecía un almohadón viejo con agujeros para sacar los brazos y las piernas.

Eso es muy triste_ dijo Luna, Hermione asintió.

Mas que triste, es cruel_ dijo ella, Harry le sonrió esperando que no de una charla sobre los derechos de los elfos.

—Esto..., hola —saludó Harry, azorado. —Harry Potter —dijo la criatura con una voz tan aguda que Harry estaba seguro de que se había oído en el piso de abaje—, hace mucho tiempo que Dobby quería conocerle, señor... Es un gran honor... —Gra-gracias —respondió Harry, que avanzando pegado a la pared alcanzó la silla del escritorio y se sentó. A su lado estaba Hedwig, dormida en su gran jaula. Quiso preguntarle «¿Qué es usted?», pero pensó que sonaría demasiado grosero,

Solo un poquito_ dijo Hermione mirando a Harry con diversión.

Por eso no le pregunte eso_ dijo el.

así que dijo: —¿Quién es usted? —Dobby, señor. Dobby a secas. Dobby, el elfo doméstico —contestó la criatura. —¿De verdad? —dijo Harry—. Bueno, no quisiera ser descortés, pero no me conviene precisamente ahora recibir en mi dormitorio a un elfo doméstico.

No puedo creer que lo trates con tanta cortesía _ dijo Draco asombrado.

No lo tratare mal solo porque es un elfo_ dijo Harry con seriedad_ es una criatura sensible_ dijo Harry_ Draco frunció el ceño confundido, pero Hermione le dio una sonrisa orgullosa, que el correspondió.