La historia del trio de oro

Plata y ópalos

Harry Potter pertenece a J.K.ROWLING

Supongo que ahora leeré yo_ dijo George, que había recibido el libro de Fred.

Plata y ópalos_ leyó frunciendo el ceño.

Ni idea de por qué se llamaría así_ dijo Harry cuando todos lo miraron.

¿Dónde estaba Dumbledore, y qué estaba haciendo? Harry vio al director sólo dos veces en las semanas siguientes. Ahora ocasionalmente aparecía en las comidas, y Harry estaba seguro de que Hermione tenía razón cuando pensaba que se estaba yendo del colegio por días a veces. ¿Habría Dumbledore olvidado las lecciones que le tendría que estar dando a Harry? Dumbledore había dicho que las lecciones iban a llevar a algo que tenía que ver con la profecía; Harry se había sentido alentado, confortado, y ahora se sentía un poco abandonado.

No creo haber olvidado las lecciones_ dijo Albus_ pero lo que debo estar haciendo seguro es muy importante.

Más importante que la profecía_ preguntó Harry.

Tal vez está relacionado_ dijo Albus luciendo pensativo.

A mediados de octubre llegó la primera salida a Hogsmeade del curso. Harry se había estado preguntando si estos paseos iban a seguir permitidos, por todas las medidas de seguridad alrededor del colegio, y se alegró de que se llevaran a cabo; siempre era bueno salir del área del castillo por unas horas.

No es eso peligroso_ preguntó Molly.

Por el momento no lo creo_ dijo Albus_ además los aurores están ahí_ añadió.

Harry se despertó temprano la mañana del paseo, que amaneció tormentosa, y pasó el tiempo hasta el desayuno leyendo el libro de Pociones Avanzadas. Generalmente no se quedaba en la cama estudiando; ese comportamiento, como decía Ron acertadamente, era indecente en todos menos Hermione, quien era rara en ese sentido.

Estoy de acuerdo_ asintió Ron mientras Hermione le daba una mirada mitad ofendida, mitad divertida.

Bueno, es comprensible que quiera leer el libro del príncipe_ dijo Harry.

Sin embargo, Harry pensaba que la copia del Príncipe Mestizo de Pociones Avanzadas difícilmente podía ser considerado como un libro de estudio. Cuanto más leía Harry ese libro, más se daba cuenta cuánto había en él, no solo las pistas y atajos en las pociones que tan buena reputación le estaba dando con Slughorn, sino también las imaginativas fórmulas y maleficios garabateadas en los márgenes, las cuales, Harry estaba seguro por las tachaduras y revisiones, habían sido inventadas por el Príncipe. Harry ya había intentado unos pocos de los hechizos inventados por el Príncipe. Hubo uno que hacia que las uñas de los pies crecieran alarmantemente rápido (éste lo había probado en Crabbe en el pasillo, con resultados muy entretenidos); otro que pegaba la lengua al paladar (que había usado dos veces, aplaudido por todos, en un desarmado Argus Filch); y, quizás el mas útil de todos,

Muchos estallaron en carcajadas ante eso, mientras los adultos tenían miradas desaprobadoras.

Vaya Potter_ dijo Severus secamente_ parece que desarrollaras el habito de tu padre de nadar hechizando a la gente.

Seguramente se lo merecían_ dijo Harry rápidamente.

Lo que yo espero, es que el libro dijera exactamente lo que hacían esos maleficios_ dijo Sirius_ no me gusta eso de que probaste el hechizo.