Solo el amor nos salvará (tercera parte)

Capitulo 427

• Ya me voy, Malula.

- ¿Ya? Aún es pronto.

• Te veo el sábado.

Cantará conmigo en el palacio, me hace muchísima ilusión volver a compartir el escenario con él.

- ¿Estas bien?

Su respuesta es un gesto que no sabría descifrar, pero le falta esa chispa y el brillo en los ojos que tanto le caracterizan.

- ¿Sabes que me tienes, no? Puedes contarme lo que sea.

• Claro, y tú a mí.

Me da dos besos.

• Ale.

Le llamo antes de que salga.

- Vente a cenar mañana, después de acostar a las chicas podremos hablar tranquilos.

• Estoy bien.

Asegura, aunque no le creo.

• Me apetece venir a veros.

- A las 9.

• No cocines, paso por el chino.

- Porción doble para mí.

Pido graciosa, de repente me han entrado unas ganas locas de zamparme todo lo que tienen en ese local hasta quedar empachada.

• Sigo sin entender donde metes todo lo que comes, pero habrá porción doble para ti.

Me hace reír. Es un buen momento para confesarle que la familia crece. Entorno la puerta a mi espalda y teniendo la privacidad necesaria suelto la bomba.

- Ahora si que tengo que comer porción doble.

• Lo llevas haciendo 38 años.

- Pero ahora somos dos.

• ¿En serio?

Asiento con una enorme sonrisa, y de inmediato siento sus brazos rodearme.

• ¡Enhorabuena!

- Gracias, corazón.

+ Bonita, te estaba buscando.

Aparece, abriendo la puerta.

• Enhorabuena, colega.

+ Muchas gracias.

• Me alcanzas, ¿eh?

Reímos.

• Yo me voy ya, os veo mañana.

Se despide de ambos y le veo desaparecer.

- Le pasa algo.

Comento a mi chico.

+ Sí, ¿no te ha dicho nada?

- No, espero que mañana me lo cuente, le he invitado a cenar.

Narra Gaby

- ¿Por qué me buscabas?

+ Me parece un buen momento para contar la noticia, que luego empezarán a irse.

- ¡Que nervios!

+ Seguro estarán súper felices nosotros.

Recibo sus labios gustoso en los míos y luego entramos. Pepe y José están con las guitarras y son varios los que acompañan con palmas y taconeos. Mi chica no puede evitar unirse a la fiesta flamenca improvisada que se ha montado su familia, por lo que me veo obligado a esperar, pero nada me importa, se ve tan a gusto rodeada de los nuestros y haciendo lo que disfruta, que prefiero contemplarla y disfrutar del show que ofrecen los De Lucia.

S: Nos vemos.

Su amiga le hace un gesto de despedida.

- Espera, Solete.

La para. Y con esto a todos los que están sumergidos en la música.

- Tenemos una cosa más que contaros.

Se acerca a mi y entrelaza nuestros dedos, esta acojona', lo noto al instante, las miradas de los presentes reposan en nosotros y me doy cuenta que ella no tendrá el valor de contarlo. Aprieta mi mano, rogando que sea yo quien lo haga.

+ Dentro de algunos meses, seremos uno más en la familia.

Suelto la notica lleno de felicidad. Mi chica se apoya en mi con una enorme sonrisa pero no tardamos ni cinco segundos en separarnos para ser abrazados por todas estas personas que tanto nos quieren. La vida nos ha dado muchos motivos para celebrar y somos afortunados por poder hacerlo junto a todos los que están aquí.