- Apaga eso.
Me quejo del sonido incesante de su alarma. Refunfuña perezoso, pero lo hace, incorporándose para darse una ducha. Me giro dispuesta a volver a dormir hasta que recuerdo el mensaje que ignoré ayer por estar tan a gusto entre sus brazos y ahora la curiosidad me puede.
V: "Estarás dormida, ¿no?"
V: "Siento las horas"
V: "Ingresaron al padre de Asier otra vez"
V: "He dejado a Carla con mis padres, creo que vamos a quedarnos aquí"
V: "Vale, no molesto más, lo siento, salí a fumar y me apetecía hablar"
- Joder... ¡joder, joder, joder!
Golpeo la cama con el puño repitiendo la exclamación.
- Vero.
Por suerte no tarda en cogérmelo.
- Lo siento.
V: No, yo lo siento, sé que era tarde, es que...
- ¿Cómo esta?
La interrumpo interesándome por la salud de su suegro.
V: Lo estabilizaron.
Suspira contrariada.
V: Esa maldita enfermedad.
Guardo silencio, atenta a lo que sea que quiera decir. Está en lo cierto, es una maldita enfermedad.
V: Esta acabando con él... y de alguna forma con los que estamos cerca.
- Tenéis que ser fuertes Vero. Tú más que nadie, Asier te necesita a pie del cañón.
V: Lo sé.
Su silencio me dice que busca las palabras adecuadas en la retahíla que desarrolla en su cabeza.
V: ¿Por qué la vida es tan injusta?
Se queja.
V: Vaya meses de mierda... Que es un buen hombre, Malú.
- Ya lo sé, corazón.
No he tenido la oportunidad de conocerle personalmente, pero he oído hablar muy bien de él.
- Y nadie merece vivir lo que estáis viviendo.
Coincido en que a veces el destino nos da bofetadas sin alguna explicación.
V: Tengo que dejarte. Viene el médico.
- Llámame luego.
Le pido cortando la llamada y quedándome con un amargo sabor de boca.
+ Pensé que estarías dormida.
Deja un beso en mi frente al salir del baño.
+ Tienes mala cara.
- Ingresaron al padre de Asier.
+ Jo, ¿Otra vez?
Asiento.
+ Voy a llamarle de camino al curro. ¿Cómo está?
- Estable. Vero me ha dejado para hablar con el médico.
Bufa triste. Para nadie es buen trago recibir esta noticia de buena mañana.
+ ¿Quieres una tila?
Me ofrece dulcemente. Niego con un gesto.
- Voy a despertar a las chicas.
El cariño de nuestras hijas siempre me hace sentir un poquito mejor y aunque es el quien las llevas al colegio, no pierdo oportunidad de echarles una mano y desayunar juntas.
- Buenos días.
Saludo a Alba que está por salir.
A: Buenos días.
Besa mis mejillas.
A: Ya me voy.
Anuncia.
A: Y regreso tarde.
Comenta con un camuflado nerviosismo en la voz.
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Solo el amor nos salvará (tercera parte)
FanfictionNovela inventada. La historia de amor de Malú y Gaby, una pareja que enamora. Por la cantidad de capítulos he tenido que continuar la novela como una nueva historia, pero es la misma (primera y segunda parte en el perfil). Espero que os siga gustand...