Narra Malú
Me arrastro por la puerta hasta que apoyo el culo en el suelo y me echo a llorar como una niña chica a la que acaban de arrebatarle su juguete favorito de las manos.
Danka no tarda en aparecer, para quedarse a mi vera.
Lloro de rabia. Lloro de pena. Lloro de dolor.
Quisiera salir a perseguirle y prometer que todo fue un gran error, que me acune entre sus brazos y volver a casa juntos, entre besos y trompicones para que me haga el amor hasta desgastarnos la piel. Pero estoy decepcionada. Quizá Gaby no es tan perfecto como yo pensaba.
Entre pensamientos tortuosos y lágrimas saladas pierdo la noción del tiempo. Es el sonido de mi móvil el encargado de sacarme del letargo, aún así, prefiero ignorarlo, ahora no me apetece hablar con nadie.
- Que insistencia, Verónica.
La atiendo de mala gana. He acabado por cogerlo tras varios intentos de mi amiga. Puede ser importante.
V: Vaya mala hostia. ¿Qué te pasa?
- Que me has llamado seis veces.
Reprocho.
V: Vale, adiós.
Se despide malhumorada.
- Vero, espera.
Intento retenerla.
- Lo siento.
V: ¿Qué te pasa?
- Gaby volvió de Londres.
V: Tia, pero si vas a estar echando polvos toda la tarde apaga el móvil, que una no tiene como adivinar que va a interrumpiros.
Se excusa llena de picardía.
- Le he echado de casa.
Se me escapa un puchero que rompe mi voz.
V: ¿Tu estás tonta? ¿Qué has hecho qué?
Narra Gaby
+ Ya me voy.
Anuncio tras acostar a Cami y Lu. Por suerte, a mis hijas si les ha hecho ilusión tenerme en casa y no se han separado de mi en toda la tarde.
Alba a pesar de recibirme cariñosa ha intentado evadirme un poco. Lo hace cuando sabe que voy a regañarla, el problema es que no sé por qué tendría que hacerlo. Malú no me ha contado nada desde hace días.
- ¿Dónde vas a dormir?
+ ¿Te importa?
Niega mordiendo su labio inferior, en una lucha que mantiene con sus gestos para no dejar escapar una lágrima. A veces es tan orgullosa. Como si yo no la conociera.
Lo que más rabia me da, es que daría lo que fuera por ser yo quien se las limpie.
- Mañana me voy a Valencia.
Anuncia dejándome perplejo.
- ¿Puedes ocuparte de las chicas?
+ Lo llevo haciendo desde hace 18, 5 y 3 años.
Le recuerdo irónico mencionando sus edades.
- Hace algunos días parecía que se te olvidaba.
Musita. Aunque puedo oírla, decido ignorar su comentario. Solo traerá más peleas.
+ Suerte con Verónica. A ver si ella si es capaz de darte esa contención que tanto necesitas.
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Solo el amor nos salvará (tercera parte)
FanfictionNovela inventada. La historia de amor de Malú y Gaby, una pareja que enamora. Por la cantidad de capítulos he tenido que continuar la novela como una nueva historia, pero es la misma (primera y segunda parte en el perfil). Espero que os siga gustand...