All The Young Dudes "Siriu's perspective" (Español)

Quinto año: enero

Crack, bebé, crack

Muéstrame que eres real

Golpe, bebé, golpe

¿Eso es todo lo que sientes?

Chupa, nena, chupa.

Dame tu cabeza

Antes de empezar a profesar

Que me estas dejando muerto

Domingo 4 de enero de 1976

"¿Vamos por favor?"

"No."

"¿Por favooor ?"

"Dije que no !"

"No es que sea difícil, ¡sólo hay que meterlo en ello!"

"¿Qué pasa si te hago daño?"

"No lo harás."

"Haz que James lo haga".

Sirius hizo pucheros. -No quiero que James lo haga. Tú eres mejor en estas cosas, Moony.

Remus suspiró. Sirius había estado engatusándolo durante las últimas dos horas, desgastándolo lentamente. -Nunca le he perforado la oreja a nadie en mi vida -dijo, con voz resignada-. ¿Cómo sabes que soy mejor que James en eso?

"Solamente lo hago."

Remus puso los ojos en blanco, sin molestarse en responder, y Sirius comenzó a sonreír.

-Vamos, Moony, ¿tengo que rogar?

-Has estado rogando -resopló Remus y Sirius sacudió altivamente su cabello.

-Eso fue negociar. -Cayó de rodillas frente al sofá donde Remus estaba leyendo, sonriendo diabólicamente-. Esto es pedir limosna.

Los ojos de Moony se abrieron de par en par. "¿Qué estás...?"

-Oh, por favor, gran y poderoso Moony -proclamó Sirius dramáticamente, alzando la voz-, ¡ten piedad de tu devoto seguidor! -Extendió la mano y agarró la pierna de Remus con sus manos.

"Ey-"

-¡Benevolencia, señor, para con un pobre desgraciado desesperado! Sólo usted puede salvarme de la terrible mundanidad de una oreja sin adornos, sólo usted puede...

-¡Está bien, está bien! -Remus lo empujó y se puso de pie bruscamente. Sirius sonrió desde la alfombra.

"¿Es un sí?"

-Sí, está bien, siempre y cuando dejes de actuar como un idiota.

"¡Trato!"

Todo había comenzado unos días antes, cuando la señora Potter los llevó a todos al pueblo para buscar zapatos nuevos para Sirius. (No habría ningún Callejón Diagon, según las instrucciones de Moody, aunque no había sucedido nada más con los padres de Sirius. No estaba seguro de si al Ministerio simplemente no le importaba lo suficiente el uso ilegal de la magia como para investigar o si Dumbledore lo estaba dejando sin informar a propósito. Trató de no pensar demasiado en eso, de cualquier manera). Sirius había estado extasiado de encontrar un par de botas negras gruesas como las que tenía Remus, con cordones de color amarillo brillante. La señora Potter insistió en comprarlas como un regalo adicional de Navidad tardía, a pesar de que los Potter ya habían hecho tanto por Sirius que no tenía idea de cómo les pagaría alguna vez.

De camino a casa, se habían cruzado con un grupo de muggles que vestían de forma muy distinta a los demás habitantes de la pequeña y tranquila ciudad. Iban ataviados con vaqueros rotos y chaquetas de cuero, recostados contra una pared de ladrillos y pasándose un cigarrillo de un lado a otro con pereza. Uno tenía un pelo de un verde sorprendente. El otro tenía una hilera de brillantes aros plateados en el cartílago de la oreja.