Sexto año: diecisiete

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Jueves 10 de marzo de 1977

"¡FELIZ CUMPLEAÑOS, REMU!"

Sirius encabezó la carga, saltando sobre la cama de Moony con los otros merodeadores a su lado en el momento en que el sol comenzó a asomar por el horizonte. Apenas cabían; una maraña desgarbada de miembros que se movían a toda velocidad, todo rodillas y codos.

-Gerroff , imbéciles -les empujó Remus-. ¿Qué hora es?

-El tiempo es inmaterial -cantó James, levantando aún más su puntiagudo sombrero de fiesta hacia arriba en su cabeza-. Es tu cumpleaños .

-¡Tu decimoséptimo cumpleaños! -Sirius sonrió, moviendo las cejas. También se había puesto un sombrero de fiesta, de lunares, que contrastaba horriblemente con su corbata escolar a rayas.

-¡Ya eres mayor de edad ! -se rió Peter, lanzándose hacia el nervioso cumpleañero con otro sombrero de fiesta, que se ajustó firmemente alrededor de la cabeza.

Remus los miró frunciendo el ceño, exasperado.

"Vas a hacerme usar esto todo el día, ¿no?"

Los tres chicos asintieron, perfectamente sincronizados, haciendo que las serpentinas de colores que llevaban en sus sombreros revolotearan bajo la luz del sol de la mañana.

-Es impermeable -le dijo Sirius-, así que incluso puedes ducharte con él puesto. En un momento de aturdimiento, le guiñó un ojo y fue recompensado con un rubor muy satisfactorio que se extendió por las mejillas de Remus. Ni James ni Peter parecieron notarlo, demasiado ocupados poniéndose de pie.

Los chicos sacaron con cuidado el pastel de chocolate de la señora Potter de su escondite (entregado por lechuza apenas una hora antes y mantenido caliente con uno de los hechizos de calentamiento patentados de Sirius) mientras Remus se duchaba. Cuando salió, con el cabello goteando sobre sus hombros, ya tenían un gran trozo cortado para él, junto con una pila de tarjetas de cumpleaños que habían estado recolectando durante toda la semana. Remus sonrió tímidamente mientras las abría y le dijo a James que agradeciera efusivamente a su madre por el pastel.

-Y recibirás tu regalo más tarde -le dijo James sonriendo-, en la fiesta.

-Estáis todos locos -Remus sacudió la cabeza y los siguió hasta la sala común-. No deberíais tomaros tantas molestias.

-Cállate, Moony -respondió Peter alegremente.

-¡Feliz cumpleaños, Remus! -dijeron a coro Lily, Mary y Marlene una vez que el grupo llegó al comedor. Sirius estaba muy contento de ver que Lily había convencido a las otras chicas de que usaran sus sombreros de fiesta (los accesorios habían sido idea suya).

-Muy bien, Evans -James le dio un codazo mientras se sentaba, sonriendo-. Sabía que no me decepcionarías.

-Oh, vete a la mierda, Potter -puso los ojos en blanco y le dio un codazo, reprimiendo una sonrisa.

Por supuesto, tuvieron que realizar su tradicional interpretación de "Feliz cumpleaños", y encabezaron el coro del Gran Comedor en tres rondas antes de disolverse en vítores y aplausos. Remus, que parecía muy sonrojado, se puso de pie e hizo una reverencia tímidamente. Junto a él, Sirius silbó y James se rió a carcajadas.

Cuando llegó el correo de la mañana, dos lechuzas diferentes se lanzaron frente a Remus, cada una con una carta. Sirius miró por encima de su hombro, con curiosidad: una era de Ferox. La otra, de Dumbledore.

Remus tomó el sobre sellado y lo abrió rápidamente debajo de la mesa. Sirius se acercó un poco más, con la barbilla casi apoyada sobre el hombro del otro chico mientras leían.

All The Young Dudes "Siriu's perspective" (Español)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora