Wade Wilson;

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Caminaba tranquilamente junto a sus bolsas de compras por el centro de la ciudad. Observaba cada mínimo detalle que los edificios le ofrecían, a las personas que se movilizaban a su alrededor. Jamás se percató de la presencia de un malhechor que pretendía sobrepasarse con ella.

—¡Hey! ¡Suéltame! —golpeó, fuertemente, el abdomen del sujeto desconocido. Logró deshacerse del agarre y comenzar a correr pidiendo auxilio.

El hombre logró alcanzarla a  la altura de un callejón oscuro, en un barrio que a aquellas horas de la noche le pareció desconocido a _____. Además de aterrador.

—Ahora si, nena —murmuró, acercando bruscamente su rostro al de ella, demostrando que se encontraba ebrio—; es momento de disfrutar.

La muchacha se resistía, depositándolo golpes a diestra y siniestra. Todos sus movimientos disminuían la paciencia del mal nacido, quien, luego de algunos segundos, mostró un arma que se hallaba en su cintura. _____ sintió la necesidad de llorar, pero debía mantenerse fuerte y mostrarle que no se rendiría.

—¡Tú! —una voz desconocida resonó en cada esquina del solitario lugar—. No es manera de tratar una dama. Suéltala —ordenó un enmascarado que se acercaba por uno de los extremos— ¿No escuchaste? Suéltala.

Tres segundos más tarde, se encontraba sosteniendo el cuerpo inerte del sujeto que había pretendido hacer cosas indebidas con ella. Asqueada, soltó la anatomía, antes de girar su cuerpo y enfrentarse al hombre de traje rojizo.

—Gracias —argumentó, acomodando sus prendas. Le dedicó una diminuta sonrisa, manteniendo sus ojos sobre él hasta verlo desparecer entre las sombras.

...

—¿De nuevo? —indagó, burlón—. Te regalaré un buscador para que no te cruces con todos los mal nacidos de esta asquerosa ciudad.

_____ soltó una diminuta carcajada ante la ocurrencia de su héroe. Nuevamente había sido víctima de la inseguridad que se vivían en aquella parte de la populosa ciudad.

—Gracias, sujeto enmascarado —murmuró, alejándose unos metros de la anatomía del hombre de traje rojizo.

Comenzó a emprender el camino hacia su departamento, cuando escuchó los pasos de alguien detrás suyo. Suspiró profundamente, pensando en que podía tratarse de otro malhechor nocturno.

—No te asustes, sólo quiero comprobar de que llegues a casa sana y salva. Sin tener que salvarte el trasero.

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nebulaycosmos espero que te guste este pequeño imagina de Wade 😏

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