pietro maximoff;

9.9K 673 19
                                    

Sus azulinos ojos se movilizaron sobre cada sujeto que permanecía dentro de aquellas gélidas celdas, aislados de la realidad. Aferró los documentos sobre su pecho y continuó su marcha por el angosto pasillo.

Las exclamaciones, algunas de dolor y otras maldiciendo a los guardias, se adentraban por la cavidad auditiva de la muchacha. Detestaba encontrarse atrancada en aquel mundo, detestaba formar parte de una organización tan sádica, pero, ¿acaso tenía otra opción?
—Señorita Smith —la nombrada alzó su vista. El coronel la observaba desde detrás del escritorio—, los hermanos Maximoff han traído problemas a sus respectivos guardias...

—Están desarrollando sus mutaciones demasiado rápido, esto..

Calló al instante. La frívola mirada que su “padre” le había enviado atascó sus palabras. Retrocedió unos pasos, sintiendo como el miedo comenzaba a florecer en su interior.

Segundos más tarde, se hallaba encaminándose hacia la habitación-celda que pertenecía a los hermanos Maximoff. Debía acatar las órdenes del coronel a la perfección, un error más y su familia acabaría cuatro metros bajo tierra.

—Leyla —susurró Pietro, mientras la muchacha de cabellos castaño tomaba una de las jeringas con “suero del súper soldado”—. No, por favor.

—Lo siento.

...

Los meses transcurrían con lentitud para Leyla. Luego de la desaparición de los hermanos Maximoff, había logrado escapar de las entrañas de la organización nazi.

Había conseguido alojamiento y trabajo como niñera de una familia de clase media en la ciudad de Sokovia. Estaba feliz, por primera vez en su vida era libre de hacer lo que ella quisiera. Pero se encontraba constantemente atormentada por su pasado, por haber ayudado a arruinarle la vida a miles de personas alrededor del mundo.

—¡Mark! —exclamó, desesperada.

Rebuscaba con su mirada al pequeño niño, temía que le hubiera pasado lo peor. Aquella mañana de primavera, un ejército de soldados roboticos habían interrumpido en la ciudad, destruyendo todo a su paso y asesinando a los humanos que se cruzaban en su camino.

—¡Cuidado!

Unos instantes después, se hallaba entre unos musculosos brazos. Alzó su mirada, encontrándose con unos familiares ojos azulados. Su corazón dio un vuelco al percatarse de que se trataba de la persona que había robado su corazón.

—Pietro —susurró. Una sonrisa apareció en el rostro del joven, quien acarició las mejillas de Leyla con ternura—, estás vivo.. Estás vivo. 

—Prometí volver por ti y recatarte de aquel horripilante mundo.


___
-Sti1es24 espero que te guste 😍

tadaaa, ¿alguien se percató de que ya son 100 imaginas? ¿nadie? bueno, ¡YA VAN 100 IMAGINAS! 🙌






→marvel's one shots←Donde viven las historias. Descúbrelo ahora