Capitulo 36

692 55 14
                                    

Estaba recostada en el pecho desnudó de Anthony, me gustaba escuchar el latido de su corazón y sentir su respiración, me relajaba muchísimo.

—¿Puedo preguntarte algo?— le dije a Anthony.

—Claro, dime.

—¿Por que cambiaste conmigo? Estábamos bien y de un día para otro me trataste horrible.

Anthony soltó un suspiro.

—Yo quería sorprenderte en la fiesta, tenía planes para nosotros pero esa mañana Cedin me llamo, me dijo lo mal que lo estaba pasando con tu indiferencia, me sentí muy mal... él estaba sufriendo por mi culpa... me dijo que sentía que estabas saliendo con alguien más y claro, ese alguien soy yo... Su mejor amigo.

—No por eso tenías que haberme tratado así.

—Lo se... pero todo fue tan rápido que no medí la consecuencia de mis actos... quería alejarte de mi y en la fiesta encontré la manera de hacerlo pero no quería lastimarte, te lo juro. Las cosas se me salieron de control.

—Me sentí muy mal... estaba consciente de que no tenía derecho a reclamarte nada, pero de eso a que me mandarás a acostarme con otro hombre...

—Y No me cansare de pedirte perdón... Trate de hablar contigo y disculparme en ese momento pero me mandaste a la mierda.

—Te lo merecías.

—Lo se y créeme que no dormí por pensar lo que estarías haciendo con Cedin.

—Hicimos muchas cosas— le dije a Anthony moviendo las cejas.

—¿Le dijiste que no puedes tener hijos?

—¿Quieres que se decepcione de mi?—le pregunte riéndome.

—Para nada... pero...

—Pero nada— le dije volteándolo a ver.

—¿Que?— me dijo viéndome extrañado.

—Sabes...Podría pasarme todo el día admirándote— le dije acariciando sus labios.

Anthony solo sonrió apenado.

—Estas todo hermoso— le dije sin dejar de acariciar su rostro.

Anthony empezó a ponerse colorado. Tan bonito, estaba apenado.

—Me gustas tanto maldita sea— dije tapándome el rostro con frustración Y Anthony soltó una carcajada.

—¿Tienes algún defecto físico? Por qué Dios... pareces esculpido a mano.

—Tan boba— dijo riéndose apenado.

—Es que mira... me encantan tus manos— le dije agarrándoselas... Eran tan grandes, me gustaba como se le marcaban las venas.

—Son para tocarte mejor— dijo agarrándome un seno de modo juguetón.

—¡Oye!— le dije cubriéndome.

—¿Que más te gusta de mi?— dijo en modo seductor.

—Todo... tu color de piel... Estás nalguitas tan bonitas que Dios te dio— dije agarrándole una nalga.

Romeo soltó una carcajada.

—¿Es que por qué estás tan jodidamente sexy?— le dije frustrada.

—Estas loca mi amor— dijo jalandome para que me acostara encima de él.

—Estas para chuparte entero— le dije mordiéndome los labios.

Soltó una carcajada y se tapó la cara.

—¿Por que te pones rojo?

—Por que soy penoso! Así donde me ves, soy un tipo penoso.

—Te amo— le dije riéndome y le deposite un tierno beso en los labios.

—Yo Te amo mas mi loquita— dijo apretándome contra su cuerpo sin dejar de sonreír.

No quería que este momento terminara nunca. Lo quería así, siempre para mi.

—¿Lo pasas bien conmigo?—le pregunte.

—¿Tu que crees?

—No lo se, por eso te pregunto.

—Lo pasó muy rico contigo—dijo con una sonrisa coqueta.

—¿Que tan Rico?— le dije pasando un dedo por sus labios.

—Tan rico que no pienso en otra cosa que no sea tenerte aquí a mi lado.

—¿Dejarías que te amarre a la cama?— le pregunte derrepente.

—No— dijo riéndose.

—¿Por que no?

—Prefiero someterte a que me sometas, soy un alma libre.

—¿Y si mi fantasía es amarrarte y hacerte lo que me plazca?

—Puedes hacerme lo que te plazca sin necesidad de amarrarme.

—En tu vídeo sales amarrado a una cama... Te me antojaste muchísimo así... y ahora...

—Con que viendo mis vídeos...

—Si y la mayoría los odio...Que necesidad de que las toques tanto.

—Es mi trabajo— dijo sonriendo.

No pude evitar ponerle los ojos en blanco.

—No hagas eso por qué me imagino otra cosa— dijo dándome una nalgada.

—Tímido, tímido pero eres bien caliente y mano larga— le dije sobandome una nalga.

Anthony sonrió y me derretí en sus brazos ¿Como alguien podía ser tan jodidamente Perfecto?

—Mi amor... debo decirte algo para que no te tome por sorpresa...— dijo poniéndose serio.

—¿Que pasa? ¿Eres gay?

—¿Te parezco un tipo gay con las buenas folladas que te doy?— dijo ofendido.

—Bueno... uno nunca sabe...— dije apenada.

—Me ENCANTAN las mujeres, a tal grado que tengo dos— dijo riéndose.

—Eres un sin vergüenza— le dije riéndome entre cerrando los ojos.

—Bueno... Fran va a celebrar su cumpleaños y llamará a cedin para invitarlos.

—¿Somos unas horribles personas sabias?

—Lo se.

Realmente me sentía mal... tanto mi novio como la novia de él eran unas increíbles personas, no las merecíamos.

—Ellos se merecen el uno al otro por ser tan Buenos y nobles—le dije recargada en su pecho.—en cambio tú y yo nos merecemos por ser unos infieles.

—Que lista eres...

A Pesar de que Anthony me había declarado su amor, estaba consciente que tenía que compartirlo, él nunca la iba a dejar por mi... Lo nuestro era imposible por donde lo viéramos.
Y tampoco estaría dispuesto a perder a su casi hermano por una mujer.

—¿Te puedo preguntar algo?

—Estas muy curiosa el día de hoy...— dijo acariciando mi cabello.

—¿Sientes celos cuando me ves con Cedin?

—Si... muchos.

—No se como voy a hacer para verte del brazo de tu novia, como aguantar que te bese y te toque frente a mi...

—Tu sabias cómo sería nuestra relación...

—Eso no significa que no sea difícil para mi— le dije levantándome de la cama para meterme al baño.

Clandestino / Romeo Santos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora