Capitulo 18

112 16 3
                                    

Río a carcajadas con José, Yago y Julián. Ellos se han venido a otro garito con nosotros y llevamos unas cuantas copas de más. Cato también se ha sumado pero desde que vio a una rubia guapa no hemos vuelto a saber de él.

Ju: Vamos jefa a perrear un poco.

Propone acabando el contenido de su copa de un solo trago y moviéndose al ritmo de la canción.

- ¿Sabes que este era mi sueño de adolescente, verdad?

Río asomándome a la pista con él.

Ju: Como para no haberme dado cuenta.

Me burla.

Ju: Que pesada eras.

Recuerda gracioso. Yago y el llevan una vida siendo amigos de José y cuando yo tenia 12 años me moría por Julian. Me parecía el tío más guapo del mundo.

- Jaja que imagen.

Carcajeo avergonzada.

Ju: Oye, que aquel tronco de allí te mira como tú a mi a los doce.

Me giro sin dejar de moverme al ritmo de la canción y le guiño un ojo. Tanto alcohol me tiene desinhibida y he venido aquí a divertirme. La gracia que me hará ver a José convenciendo a papá que quiere ser él quien nos invite al desayuno.

- Muy guapo.

Valoro volviendo a bailar con mi guitarrista y amigo. Sin ningún tipo de reparo aquel chaval de ojos claros y pelo moreno se cuela entre nosotros invitándome a una nueva copa de alcohol.

** Por ti.

Leo en sus labios. El volumen de la música apenas me deja escuchar su voz.

Ju: Voy a seguir vuestro ejemplo.

Ríe apartándose para invitar a alguien a bailar. José y Yago también lo hacen con dos chicas que parecen gemelas.

** ¿Cómo te llamas?

Me sorprende la pregunta. No suele pasarme que no me reconozcan.

- Lucía.

Aprovecho la oportunidad para esconderme en el anonimato.

- ¿Y tú?

** Nicolás. ¿Fumas?

Me ofrece un cigarro al acabar la canción.

- Más de lo que debería.

Contesto risueña y le sigo para salir a alimentar el vicio.

** Por los vicios.

Vuelve a beber y enciende su cigarro.

- ¿Tu siempre estás brindando por algo?

Carcajeo. La primera copa lo hizo por mi y ahora por los vicios. Yo bebo sin más.

** Solo cuando una chica muy guapa me pone nervioso y no sé bien como entrarle.

Sus labios carnosos me hacen desear probarlos y su mirada seductora mezclada con todo lo que llevo encima encienden mucho mis ganas de acabar la noche con el, por lo que me lanzo sin tapujos a su boca.

- Vámonos de aquí.

Todos los secretosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora