+ Joder, Malena.
Me quejo por su sinceridad, aunque no me esté diciendo nada que no sepa. Oír la cruda verdad salir de la boca de otra persona es como una bofetada de realidad que no sé como enfrentar.
+ ¿Te das cuenta que si no hablo sigo siendo el cabrón que la enamora cada día, y un maldito mentiroso; y que si lo hago, dejo de ser el cobarde que no se anima a confesarse, pero voy a perder a las dos personas que más me importan en el mundo?
M: La tenés jodida, macho.
Valora.
M: Aunque a mi la que me preocupa es Eva.
Advierte honesta.
M: Porque a Malú no vas a perderla.
Resoplo. Ojalá yo tuviera su seguridad.
Narra Malú
Por fin en Valencia. El viaje se me ha hecho largo, Martín está algo apagado y aunque ha conducido él, no está tan conversador como suele ser, por lo que la música nos ha acompañado más que las charlas, por mundanas que sean. Nuestros dedos sí han venido manteniendo su costumbre de entrelazarse cada vez que puede quitar una mano del volante.
Llegamos al hotel donde nos alojaremos sobre las seis de la tarde. Vero insistió en que nos quedemos en su casa, pero aunque mi chico no ha puesto pegas, aún no tiene la confianza con mi mejor amiga, y creí que estar solos y disponer de nuestros tiempos y privacidad nos vendría mejor.
- Voy a ducharme.
Anuncio besando su boca. No hemos podido contener nuestras ganas y ya hemos inaugurado la enorme cama que ocupa casi toda la habitación como más nos gusta.
- Y luego Vero nos espera a cenar.
Le recuerdo.
+ Sí.
Se queda con mi labio inferior entre los dientes, provocándome otra vez.
- No me líes.
Le pido risueña.
- Que luego llegamos tarde y Verónica sacará conclusiones aunque no le demos motivos.
Así es mi mejor amiga. Una mal pensada en toda regla.
+ Ve.
Deja un pellizco en mi culo cuando salgo de la cama para meterme en el baño. Disfruto del agua caliente recorrer mi cuerpo y tras aclararme salgo. Me visto cómoda. Pantalón negro y un jersey rojo intenso, zapatillas y el pelo sin arreglar demasiado. Sí que dedico un par de minutos a maquillarme, aunque bastante natural.
- ¿Martín?
Le llamo al no encontrarle en la habitación, y el movimiento de las cortinas por el viento me ayuda a dar con él en la terraza. Ya se ha vestido, y está sentado mirando las vistas, pensativo.
- ¿Qué pasa, nene?
Me siento en su regazo, de lado, quedando en la posición perfecta para mirarle y dejar una caricia cargada de cariño en su mejilla.
- Estas ausente.
Cuela su mano por mi ropa y acaricia el bajo de mi espalda.
+ Lo siento.
Se disculpa.
- No tienes que pedirme perdón.
Aseguro.
- Pero no me gusta verte así.
+ Estoy preocupado por Eva.
- ¿No se ha quedado bien?
+ Sí, no es eso, está con Malena, iba a llevarla al cine y tenían varios planes chulos para estos días.
- ¿Entonces?
Suspira contrariado.
+ No quiero perderla, Malú.
Confiesa con pánico en los ojos.
Como ya sabéis, las historias de Wattpad solo pueden tener 200 capítulos y con este hemos alcanzado el número.
En primer lugar GRACIAS por llegar hasta aquí leyéndome y acompañándome en esta novela! Espero que la estéis disfrutando!
Ya sabéis que sigo escribiendo. Cuando suba el capítulo 201, actualizaré también éste para poder dejaros el enlace a la segunda parte, pero este tema ya me ha dado guerra alguna vez, no estoy segura de que las notificaciones de los capítulos también os lleguen cuando actualizo algo ya publicado, por lo que si buscáis (desde mañana) en mi perfil, encontrareis una nueva historia que será la continuación de esta.
Otra vez gracias por leerme, apoyarme y comentar!
Alma
Aquí tenéis el enlace para la Segunda parte de esta historia.
Espero estar a la altura y que os guste ♥️
La encontráis también en mi perfil
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