Capítulo 44

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+ Bueno, todos parecéis tener buen rollo.

Po: Lo tenemos.

Asegura.

Po: Somos una familia.

Me cuenta.

Po: Pero Rosa es... Rosa.

+ Vaya.

No digo más. Aunque agradezco profundamente la información que me ha dado.

+ Mírales, que felices están.

Sonrío orgulloso observando al pequeño público que está rendido frente a ella tras acabar escuchando la canción en silencio.

Po: Has tenido una idea muy noble, Martín.

El también está feliz con el resultado.

+ Luego podríamos ir a tomar algo.

Me atrevo a proponer.

+ Los cuatro.

Incluyo a Malú y José. Un bar, cervezas, tapas y ambiente distendido es todo lo que necesito para hacerme con algo más que me acerque a la verdad.

Po: Claro que sí.

Narra Malú

Me bajo del improvisado escenario emocionada. Ha sido un público especial. Hay experiencias que siempre guardaré en mi corazón, y esta es una de ellas.

+ Hemos repartido los discos.

Me cuenta incómodo.

- ¿Cuál es el problema?

+ Ha venido más gente de la que esperábamos. Portu ha traído algunos extra del coche, pero no están firmados.

- Consígueme un rotulador.

No sé si este encuentro me ha hecho más feliz a mí o a ellos, y no pienso permitir que ningún niño vuelva a casa con mal sabor de boca porque su disco no está firmado.

+ Ten.

Me lo tiende con una sonrisa de alivio y sorpresa.

+ Pensé que querrías irte rápido de aquí.

Murmura aclarando mis dudas.

- Que va, voy a firmar los que faltan. De aquí todos nos vamos con una sonrisa en la cara.

+ Estupendo.

Tras varios discos que he tenido firmar y otras muchas fotos que he aceptado hacer nos vamos juntos a un bar. Martín me ha dicho que Portu ha tenido la idea y honestamente no se me ocurre un mejor plan.

J: Por lo bonito que ha sido y el pedazo de gira que está por arrancar.

José es el primero en brindar. Nuestras cervezas se unen a la suya para chocarlas y dejarme oír ese sonido que representa alegrías.

Po: ¿Estas nerviosa, jefa?

El primer concierto benéfico organizado por Martín es la semana que viene. Dos días antes de nochebuena.

- Ataca', como siempre.

Me encojo de hombros. Oficialmente el tour guerra fría inicia dentro de cuatro días.

+ ¿Qué se siente cantar delante de miles de personas?

Se interesa.

- Mucha responsabilidad.

No dudo al responder.

- Y es... increíble.

+ Cuéntame más.

Me pide entablando una conversación amistosa.

- No se explica, Martín. Tienes que vivirlo. Es la hostia.

Sonrío sonoramente.

- Da mucho vértigo, como cuando estás en la parte mas alta de una montaña rusa.

Explico.

- Pero también te da esa adrenalina que sientes cuando bajas a toda velocidad y no puedes dejar de sonreír porque es la mejor sensación que has sentido jamás.

+ Que pasada.

Comenta alucinado.

- ¿Y tú, por qué no te has dedicado a la música?

Me atrevo a preguntar. Toca tantos instrumentos que me intriga saberlo.

J: Hermanita, yo me voy.

José nos interrumpe.

J: Tengo cosas que hacer.

Se excusa antes de que pueda preguntarle a donde. ¿Quién puede tener tantos recados un viernes por la tarde? Creo que mamá tiene razón. José está conociendo a alguien y el capullo aún no me lo cuenta.

Po: Yo también me voy chicos.

Se levanta con mi hermano dejando un par de monedas sobre la mesa.

Po: Como no vuelva pronto a casa, la verdadera jefa se enfada.

Ríe hablando de su mujer. Es un encanto.

Martín me mira incómodo. ¿Y nosotros, ahora que hacemos?

+ ¿Nos quedamos un poco más?


Contadme que pensáis? Se quedarán? Se van? Que os gustaría que pase?

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