Narra Mateo
+ Vamos Eva, que te tardas demasiado.
Protesto mirando a mi sobrina peinarse. Solo tiene siete años, pero la idea de mudarnos hoy a Madrid la tiene tan entusiasmada que se arregla como una chica mayor antes de una cita.
E: Ya casi estoy.
+ ¿Lo tienes todo?
E: Yes.
Mira de reojo hacia el escritorio que sostiene aquella radio que ha hecho de su gran compañera durante estos días.
E: No... más o menos...
+ ¿Qué te olvidas?
Al igual que la niña miro en aquella dirección, pero no veo nada junto al aparato. Sólo algunos discos apilados de mi hermana.
E: I have all my stuff (Tengo todas mis cosas).
Asegura tímidamente. Llevo tiempo haciéndome cargo de Eva y ya la conozco a la perfección. Sé que hay algo que quiere decirme, pero no se anima.
+ ¿Qué pasa, Eva?
Me pongo en cuclillas para estar a su altura. No puedo negarle nada a la niña de mis ojos.
E: Hay un disco de la tía Elena que me gusta mucho.
Admite tímida.
E: Pero me da vergüenza pedírselo.
+ A ver, ¿cuál?
Me acerco con ella a verlos todos.
E: This one (Este).
Lo coge entre sus manitas con cuidado.
+ Joder.
E: Has dicho un taco.
Me tapa la boca risueña. Yo mismo le he enseñado que no debe de decir malas palabras, pero ¿justamente el último disco de Malú tenía que gustarle?
+ ¿Estas segura que quieres este?
Intento persuadirla.
+ ¿No hay otro que te guste más?
Hago más desorden del que ya hay buscando alguna otra opción que le mole.
E: No.
Contesta decidida.
E: I love her songs so much (Me gustan mucho sus canciones).
Me cuenta.
E: I wish I could hug her and tell her that she is the best singer (Ojalá pudiera abrazarla y decirle que es la mejor cantante).
Fantasea con ese brillo especial en los ojos que tiene cuando sueña despierta.
E: Además ella es súper bonita.
Me enseña una foto del libreto interior. Está algo gastado, haciendo notar que sus manitas han pasado varias veces por allí. Si Eva supiera que la jefa pesada de la cual le he hablado es la misma que ahora quiere tanto...
E: ¿Se lo pides tú?
Suplica con carita de no haber roto un plato jamas.
E: Porfa, Mateo.
+ No.
E: Vale.
Lo deja en su sitio presa de desilusión.
+ Voy a comprarte uno, Eva, nuevo y solo para ti.
E: Eres el mejor tío del mundo.
Me abraza feliz.
+ Y tú la más pelota.
Aseguro divertido.
+ Venga, ahora vamos a despedirnos de la tía Elena.
