Narra Malú
- Tengo cosas que contarte.
Entro en casa de mi mejor amigo que tiene cara adormilada. Con una bandeja de frutas cortadas y otra más pequeña con una napolitana rellena de chocolate para el. Yo tengo que cuidarme antes de los conciertos.
M: Me he dormido.
Se excusa.
- Así veo.
Hablamos anoche y quedamos en que me pasaría por aquí antes de los ensayos.
M: Prepara café. Voy a darme una ducha rápida.
- Tengo menos de una hora.
Advierto con un grito. El ya ha desaparecido. Pongo la cafetera y reviso mi móvil.
+ "Hiciste a alguien muy feliz anoche"
Sonrío al leer su mensaje.
- "Veo que se lo has dado sin chantajes, estoy orgullosa de ti"
Contesto.
- "Nos vemos luego y me lo cuentas"
+ "No llegues tarde"
Me pica desconectándose antes de que pueda decir algo. Creo que nuestro primer encuentro le ha traumatizado.
M: ¿Quién te hace sonreír así?
Melendi me mira haciéndome saber que no podré escapar de la respuesta que está buscando.
M: Que te has empanado y el café ya está casi frío.
Me burla volviendo a hervir el agua.
M: Asumo que de esto mismo me querías hablar.
- Hablaba con Martín, y sabes que no tengo nada que contarte de él.
+ Lumi, te hace sonreír.
Insiste divertido.
+ Pero ahora que lo pienso, no sé en qué momento dejó de ser el cabrón de la cobra para convertirse en el que te roba la sonrisa.
Presume de mis secretos alardeando de nuestra confianza para hacerme de rabiar.
M: ¿Tan bien folla?
- No me he acostado con él, guarro.
Le recrimino defendiéndome. El carcajea al ver como me pongo de morros.
- Melendi te odio.
Sentencio dándole un guantazo. Menudo capullo.
M: Vale, vale... no te vacilo más.
Acepta la tregua.
M: Pero cuéntame como y cuando ha sido este cambio.
- Ayer.
Me tapo la cara con las manos intentando ocultar la sonrisa boba que se me dibuja al recordar la tarde que pasamos.
M: Ay, joder. Estas hasta las trancas.
Vuelve a reír abrazándome gracioso.
- Que no, Melen.
Prometo.
- Es solo que me ha pedido perdón. Me pidió otra oportunidad para ser amigos, y me la pasé muy bien.
Le cuento toda la verdad.
- Podemos hablar de todo, y me siento cómoda, ¿sabes?
M: Mi mejor amiga se están enamorando.
Grita eufórico haciéndome reír.
- Basta, tronco, que no he venido hasta aquí para que me estés vacilando todo el rato.
M: Perdón.
Se disculpa y parece sincero.
M: Una sola cosa voy a decirte.
- Venga.
M: Me hace mucha ilusión verte feliz.
Voy a protestar, pero me interrumpe.
M: En serio, me da igual si sois amigos, os acostáis, te enamoras o lo que hagas. Te ves contenta Malú, y eso está bien.
