C44 - Hacerle frente a la realidad

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Esperaba en el hall del hotel a que Nico la contestase al mensaje. Miraba una y otra vez el móvil, pero el chico hacía horas que no daba señal. Estaban a punto de despegar, o eso era lo que él la dijo justo antes de embarcar, y de eso ya hacía unas cuantas horas. Sabía que por tiempo todo iba sobre lo previsto, y que el chico no estuviese conectado era más que lógico volando en un avión, pero se ponía nerviosa al ver que pasaban los minutos y que por la puerta no aparecía nadie.

Anduvo durante un rato por el hall, y se cruzaba con gente a la que volvía a ver de nuevo: compañeros de trabajo, mecánicos, e incluso pilotos. Vio a Jenson, que llegaba sin Jessica, y Sandra aprovechó que en la lejanía de la calle no venía nadie parecido a Nico para ir a abrazarle y saludarle. Hablaron un poco, en especial de las vacaciones de Nico y Sandra en esa misma ciudad, y sólo fue cuando Jenson preguntó por su amiga cuando Sandra le avisó. "Ya te contaremos", y dejó al inglés con cara de incertidumbre y lamento, igual gesto que el de ella. Se despidieron y Sandra volvió a centrarse de cara a la puerta.

- ¿Aún no han venido?-Kimi se unía a ella.

- No.-estaba nerviosa.

- Bueno, ya llegarán.

- Me imagino.-Kimi rio por lo bajo ante su estado.- ¿Hablaste con Seb?-la miraba sorprendido.

- No. ¿A qué viene eso?

- Es que va a entrar por la puerta en dos segundos.-y en unos pocos más, el alemán cruzaba la puerta al hotel mirando su móvil y tirando de su maleta. Sandra no pudo evitar mirar a Kimi al comprobar que, como había pasado hacía poco a la inversa, ahora era Sebastian que se mostraba claramente desmejorado. Kimi cogió aire, pero no se movió del sitio.- Creo que es un buen momen—

- Que sea o no un buen momento me toca decidirlo a mí.-Sandra le fue retirando la mirada poco a poco.- Perdón.

- Nada.

- No me presiones con Seb, anda.-la chica le sonrió de forma pasajera y decidieron seguir esperando, aunque Kimi aprovechó que Sebastian le daba la espalda para volver a mirarle. Siguieron esperando, y Sandra ya se movía por el lado intentando pensar en otra cosa para tranquilizarse.- ¿Tú has hablado con Yai?

- No, aún no.

- Pues ella también está a punto de entrar por la puerta.-la chica se giró y efectivamente, Nico y ella traspasaban la puerta giratoria con sus maletas. Y mientras que él sonreía como un niño al verla, Yaiza se mostraba tan deprimida que estropeó sin quererlo el reencuentro de la pareja. Nico miró a Yaiza, que andaba a su espalda, y giró la cara de Sandra, que la observaba.

- Déjala ahora, dale un respiro.-Sandra asintió y recibió sin más dilación el beso de su chico, y este la sonrió después. Kimi les miraba al lado con cara de asco, y este no iba a dejar pasar a su amiga.

- Eh.-la llamó, y Yaiza, que iba tan en su mundo que no había visto ni a Sandra ni a Kimi, se paró asustada.- Ven, anda.-la animó a ir a su lado, y ella fue intentando sonreír a darle un abrazo.- A ver si dejas de meterte en líos.-la susurró, y comprendió que el chico sabía lo que había pasado, y lejos de preguntarle que cómo había llegado a saberlo, se dejó abrazar.- ¿Cómo estás?-ella no contestó, y se limitó a sonreírle como pudo. Se soltó de él y se giró sin saberlo hacia Sandra, que la miraba junto a Nico, que la abrazaba por el hombro. Ambas se quedaron calladas, y ninguna sabía qué decirle a la otra. Nico decidió soltarse de la chica, e inconscientemente, siguió a Kimi que se alejaba del lado de Yaiza para dejarlas solas. La recién llegada se frotaba el brazo para ocultar sus nervios, y Sandra se debatía en si abrazarla o darle una bofetada. La mirada fija que tenían la una en la otra no hacía más que dificultarlo todo, y fue Yaiza la que decidió cambiar la dirección de sus ojos hacia el suelo. Se moría de vergüenza, y no sabía cómo disculparse con su amiga por lo de las últimas semanas. Sandra la seguía observando, y aunque ella ya no la mirase, no impidió que sus ojos siguiesen llamándola para que se dignase a hablarla. Pero ninguna estaba dispuesta a dar su brazo a torcer.

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