MAPS

C175 - Plan infalible

Brasil debía suponer muchas cosas para todos. A la llegada de Lewis al hotel, se limitó a despedirse de los tres que partían de forma temprana al aeropuerto con tal de beneficiar a una Yaiza que no terminaba de sentirse cómoda en aquel país.

De forma novedosa, los tres optaron por los asientos traseros de aquel taxi que les llevaba la terminal. Yaiza, con la mente ausente, iba en medio de un Kimi y una Sandra que se dedicaban miradas intentando buscar la forma de sacar un tema que la recuperase. Fue la chica la encargada de hablar de cosas mundanas, sacando ideas y planes para sus primeros días en Sao Paulo y recibiendo respuestas breves pero al menos atentas. Kimi aprovechó esa conversación entre ambas para ausentarse hasta la llegada al aeropuerto para pensar en las mismas cosas que su amiga. Perdido de la misma manera.

Se sorprendía a sí mismo por cómo estaba llevándolo todo. No en lo personal, sino de cara a toda aquella gente que sólo parecía ver el problema en una Yaiza que volvía a perderse en sus recuerdos a la entrada al avión.

- No tardaremos mucho ¿no?-Sandra preguntaba dándose a ella la respuesta con su tono de obviedad. Por ello, Kimi se limitó a negar. El chico cogió asiento en un sofá sin nada que le acompañase, dejando a Sandra dubitativa. Miraba a su alrededor, comprobando que Yaiza había hecho lo propio en la parte contraria del avión, marginándose. Seguía dudando qué hacer.

- ¿No te sientas?-Kimi intervino, acomodado ya. Ella se encogió de hombros, mirándoles a ambos.

- No sé al lado de quién, la verdad...-Kimi sonrió sin mucha emoción.

- Creo que tu amiga quiere estar sola.-solucionó, optando finalmente ella por coger el asiento más cercano a Kimi.

- Qué novedad...-susurró.

- Habla alto, no creo que te escuche.-la chica alzó la mirada hacia Yaiza, que miraba al oro lado por la ventana.

- Te veo acostumbrado ya...-él asintió.

- Bastante...

- No sé en qué situación me deja eso.-él la miró.

- No te sientas mal.-se estiró un poco, relajándose.- No es difícil acostumbrarse a ella, tampoco somos tan diferentes.-Sandra frunció el ceño ligeramente, atacada por el cansancio.

- Yo no os veo mucho parecido, la verdad...

- Y yo veo más del que os creéis.-pausó.- Tristemente.-sacó una corta risa a Sandra que se acompañó de un posterior silencio. Kimi se impacientaba por volver a sacar otro tema de conversación, se negaba a animar al descanso de su compañera en ese momento, dejándole en soledad con sus pensamientos.

- ¿Qué crees que va a pasar?-la chica cumplía su deseo en cierta medida, acudiendo de nuevo al susurro. Él la miró.- Con ellos...-se encogió de hombros de forma pausada. No era el tema que le hubiese gustado.

- No lo sé.-fue breve. Sandra no fue capaz de ignorarlo.

- Y entre vosotros...-indagó. Kimi la observó con cierto malestar el cual ella ignoró a propósito. El chico inhaló todo el aire que le permitió el cuerpo.- Hablas poco del tema...

- En realidad siento que sólo hablamos del mismo a cada rato y cada día.-Sandra se giró poco a poco hacia el frente.- Tú y todos. Con Yai, conmigo... Más con ella que conmigo, pero siempre es sobre Seb.

- T-tampoco sé de qué hablar...-confesó.- A-aún me cuesta acostumbrarme.-Kimi la miraba.- No sé cómo acercarme ni a ti ni a Yai... El otro día estuvimos las dos en su dormitorio, hablando de Seb, sí, pero estábamos como si nada hubiese pasado... y luego no soy capaz de verla en dos días... Y cuando la veo, es como si nada... Dos palabras y –se encogió de hombros.- a seguir.