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C116 - Las apariencias engañan

La sesión de entrenamientos libres del sábado fue bien recibida por la mayoría de pilotos. Todos aprovecharon el tiempo de meterse en el coche para disfrutar de su trabajo y poder alejarse de un día lleno de entrevistas y reportajes que parecían no tener fin. La finalización de dicha sesión tampoco supuso mayores problemas para los pilotos de Red Bull, que aprovechando el breve descanso antes de la clasificación, decidieron ir a comer con Yaiza y Sandra para relajarse un poco.

- Última clasi...-Sandra lo anunció con pena a la llegada al Pit Lane. Los dos chicos hablaban con sus ingenieros, y mientras Yaiza hacía una mueca de lamento a su amiga por recordar que ese sería la última sesión en Red Bull hasta octubre.

- Espero que no sea una mala clasi al menos...-no les quedaba otra que esperar algo bueno de aquello. Se sentaron al final del garaje, como siempre y hablaron un poco antes de que la primera parte de la clasificación comenzase. Ninguna pudo despedirse ni de Sebastian ni de Dani, retenidos por sus ingenieros en todo momento, y sólo Yaiza parecía nerviosa por ese pequeño detalle. Sandra consiguió hacerla desconectar en el momento en el que el semáforo se ponía verde, haciéndolas no perder detalle de las pantallas. Pretendían respirar hondo y disfrutar con calma de aquello, y pudieron hacerlo durante unos cuantos minutos hasta que el coche de Lewis decidió estamparse contra las barreras del circuito. Por inercia, Yaiza se levantó del asiento con las manos en la boca, callando cualquier grito que pudiese desconcertar a los miembros de ese garaje. El piloto no mostraba daños, y pese a que eso tranquilizaba del todo a la chica a esta le costó volver a tomar asiento. Cuando se giró temblorosa en busca de su silla vio a su amiga con el mismo rostro asustado que ella.- ¿S-se puede saber qué coño pasa?-Sandra negó disgustada, sin poder darle una respuesta.- ¿Por qué siempre los nuestros?

- Eso me gustaría saber...

El final de la clasificación no las terminó de animar. Nico se llevaría la pole con su Mercedes, a nada más y nada menos que catorce posiciones de Lewis, que saldría desde el puesto quince de la parrilla tras su accidente. Los dos Williams harían compañía al alemán en la cabeza, mientras que los dos Red Bull no pasarían del quinto puesto de Dani y el sexto de Sebastian.

El australiano fue el primero en pisar el garaje por su propio pie, y Sandra acudió a él encogiéndose de hombros sin saber muy bien qué decirle. Dani sonreía con naturalidad, y eso animó a la chica a no tomarse demasiado mal aquel resultado.

Sin embargo el sentimiento era diferente al otro lado del garaje. Nadie en Red Bull parecía esperar mucho más que lo conseguido, pero Sebastian no aceptaba quedar tan lejos de la cabeza en el gran premio de casa.

- Tú puedes, va.-Yaiza abrazaba a Sebastian por la espalda mientras cogían el camino interno del garaje para salir al Paddock. Él sonrió desganado.

- Siempre dices eso. Espero que algún día aciertes.-no aceptó su comentario pesimista, y le golpeó en la espalda con los puños de sus manos de forma suave, haciéndole reír.

- Yo digo que puedes, otra cosa es que tu coche pueda.-Llegaron al parque cerrado en donde Britta esperaba, y allí se separaron mientras el chico contestaba a las preguntas de los medios. Dani y Sandra estaban a punto de finalizar esa parte de la sesión, y Britta aprovechó que veía a Sandra alejarse antes para liberar a Yaiza de la carga laboral. Las dos amigas se pusieron rumbo al Paddock en donde el toparse con Lewis no las hizo olvidar el disgusto.

- Eyyy...-Sandra le quiso retener cuando el chico se cruzaba con ellas sin verlas. Lewis dio un pequeño brinco y sonrió por la sorpresa. Aceptó el abrazo de ambas chicas.- ¿Se puede saber qué pasa ahora?

- Prefiero olvidarlo.-rió.

- Sí, sí, olvida pero mañana para arriba.-Yaiza seguía disgustada pese a verle sonreír. Él se encogió de hombros.