C136 - Altas expectativas

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Sus dedos se movían a lo largo de su brazo de forma ya automática. Se había empezado a acostumbrar a los tempranos rayos de sol que empezaban a entrar por su ventana, aunque ya no recordaba el tiempo que llevaba dejándose iluminar por ellos. Tenía su rostro en dirección a la ventana, acompañando su cansancio por no haber dormido del calor que Cancún empezaba a hacerle notar. Cogió todo el aire que pudo y llenó sus pulmones con él, soltándolo poco a poco queriendo disfrutar de cada segundo. Giró el rostro de nuevo hacia ella, en la misma dirección en la que había pasado horas. Seguía dormida abrazada a él, y él seguía acariciando su brazo estremeciéndose cada vez un poco más. Sonrió de forma ladeada cuando ella entreabrió un ojo, manteniéndola pintada en su rostro mientras la chica se encogía bajo su brazo para estirarse.

- Qué hora es...

- No lo sé.-volvió a estirarse un poco más antes de acurrucarse hacia su pecho, elevando un poco su altura para quedar cerca de su rostro. Abrió los ojos al máximo que su cansancio le permitía.

- Tienes mala cara...-llevó su mano al rostro del chico para acariciarlo un poco, provocándole un pequeño escalofrío.

- Deberías verte a ti.-rió sin fuerza.- La tienes toda negra y blanca...-se llevó las manos al rostro recordando la pintura que rodeaba sus ojos y gran parte de su cara. Se compuso sobre el colchón con torpeza para ver que las sábanas entre las que había estado oculta tenían restos de su pintura facial, al igual que el lateral del cuerpo del chico al que había estado abrazada. Empezó a limpiarle con la mano mientras él reía.- Tranquila, si me tengo que duchar.

- Y yo, y yo...-se empeñaba en quitarle las manchas mientras mantenía su preocupación por el rostro cansado del chico.- ¿Has dormido mal?-la respondió haciendo una mueca que pretendía quitarle importancia.- Seb... Qué pasa...-se apresuró a negar y a estirarse otra vez.

- Nada, nada. Solo una mala noche. –acarició la espalda de la chica, que seguía mirándole sin confiar mucho en su palabra.- ¿Tú has dormido bien?-sentía vergüenza al asentirle.- Me alegro. ¿Lo pasaste bien en la fiesta?-volvía a avergonzarse, y empezaba a sentirse realmente mal hablando con él así.

- Sí, bueno... Habría estado mejor pasarla contigo.-Sebastian sonrió con cansancio y timidez, sin dejar de pasear sus dedos por su espalda.

- Ya... No estuve muy fino anoche.-ahora la sonrisa tímida la ponía ella.- No al menos fuera de aquí.-ambos rieron.- Estabas muy guapa anoche.

- Sabía que el segundo disfraz te iba a gustar. Hice bien en coger dos.-él negó. Tenía la mirada fija en su propia mano, acariciando aún su desnuda espalda.

- Lo estabas durante toda la noche.-Yaiza arrugó la nariz en gesto de respuesta.- Siempre lo estás, aunque no te lo diga porque soy idiota.-A medida que hablaba, ella iba perdiendo la confianza en sus palabras sobre su mala noche. Le miraba preocupada.

- ¿Estás bien?-él asintió, pero Yaiza decidió bajar hacia él tras dudarlo para darle un beso, intentando darle un motivo para estarlo un poco más. Él lo agradeció reteniéndola junto a sus labios hasta que su cuerpo le suplicó parar para buscar un poco de oxígeno.- Voy a ducharme...

La dejó marchar hacia el baño dejándose llevar de nuevo por el calor y la luz que entraba por la ventana. Estaba muerto de cansancio, su cuerpo apenas reaccionaba a lo que él le pedía, pero tampoco ponía mucho interés en que este lo hiciese. Se apoyó en sus antebrazos para intentar dejar al lado sus ganas de dormir, haciendo una curvatura con su espalda que le proporcionaba un placer relajante tras haber pasado toda la noche en la misma postura. Dejó caer la cabeza hacia atrás y respiró con profundidad antes de llevar sus piernas al lateral de la cama para ponerse en pie. Quiso sonreírse al ver el suelo lleno de ropa tanto de la chica como de su disfraz de Batman, pero no tenía fuerzas ni para eso. Las pocas que tenía decidió emplearlas en recoger un poco todo, buscando alrededor de la cama algo que ponerse mientras llevaba a cabo dicha labor.

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