Y... Por qué no?

¿HICISTE UN "HAPPY HOUR"?

...estuvo todas esas horas mentalizándose para aceptar el rechazo de su angelito-.

El momento fue roto por el sonido del timbre, el castaño deshizo el abrazo y fue a abrir, era el repartidor que traía las pizzas, pagó y se las llevó al comedor.

-Iré a preparar té  -se adentraba a la cocina-  o ¿preferís café? les contaré todo, mientras comemos.

-Té está bien  -Asami le sigue-  para mí, yo te ayudo.

-Para mí también,  -Kirishima se quitaba la chaqueta-  gracias.

A los minutos volvían Misaki y Asami con el té y lo demás para comer, Kirishima les observaba asombrado, su angelito y su jefe, actuaban en total sincronía, no hacían falta las palabras, cada uno sabía lo que tenía que hacer, parecían un matrimonio de años... ya con todo dispuesto, se sentaron a la mesa, el castaño sirvió el té.

-Podéis serviros,  -señalando las pizzas-  hay de jamón y cuatro quesos.

-Para mí, sólo té,  -Kirishima bebía de su taza-  no suelo comer ese tipo de alimentos.

-Yo, probaré la de jamón  -Asami sacaba un trozo y mordía-  ¡Mmm! Hace años que no comía pizza.

-Vamos Kirishima-san, una vez al año, no hace daño,  -Misaki mordía su trozo-  si le preocupa engordar, bien puede ejercitarse luego,  -reía mientras seguía comiendo con muchas ganas-  yo estoy hambriento y me repetiré.

Kirishima, contagiado de la alegría de su angelito, sacó un trozo que comió muy a gusto, cuando el castaño ya había comido dos trozos de pizza, bebió de su té y habló.

-Ahora os contaré todo desde el principio, pero no quiero que me interrumpan, al acabar responderé a vuestras preguntas.

Recibió un sí por parte de Asami y Kirishima.

-Bien, todo comenzó mi primer día como asistente de Kirishima-san... -siguió el relato, les contó de sus sospechas, la llamada donde oyó al hombre de finanzas confirmando sus sospechas y que también fue la primera vez que escuchó que su novio era un yakuza, pero que no le dio mucha credibilidad, su investigación hasta descubrir el qué estaban robando, las carpetas negras que leyó, sus sospechas de lo que eran y hacían bajo la superficie, sus idas al bar-  cuando vuelvas a tu oficina,  -le hablaba a Asami-  verás que tu mini bar, fue ¿asaltado?  -ladeó su cabeza y les explicó que había hecho con ese alcohol, prosiguió contándoles lo demás, los tragos adulterados y sus dudas sobre quienes estaban implicados, la actitud de la barwoman y la llamada dónde descubrió que todo era orquestado para algo más que sustraer mercancías, su loco plan, que su amigo le había secundado-  y lo de esta noche, ya lo habéis visto en la grabación.

Asami y Kirishima, oían y no se terminaban de creer lo que Misaki les contaba, si no hubiesen visto las grabaciones, pensarían que les están contando un capítulo de una serie policíaca, Kirishima cogió su móvil y envió un mensaje a los guardaespaldas, tienen que mantenerlos con vida, él, personalmente irá a sacarles el nombre del autor intelectual de ese entramado para perjudicar los negocios de su jefe y también, por qué iba a negarlo, a cobrarse por lo que le hizo ese malnacido a los muchachos... y Asami saliendo de su asombro, habló.

-Me estás diciendo,  -levanta una ceja-  que aprovechaste nuestra ausencia e ¿hiciste un "happy hour", asaltando el mini bar de mi oficina?

-¿Eso es lo único que te importa? Que haya asaltado tu mini bar,  -el castaño preguntaba con los ojos bien abiertos-  ¿acaso no escuchaste que alguien quiere perjudicar tus negocios?

-No, pero me sorprende que hayas bebido en la oficina y arrastrado a Shinnosuke en tus planes  -con un brillo malicioso en los ojos-  y ya me encargaré de descubrir quién está detrás de todo esto.

-Eso sí lo lamento,  -su tono era desanimado-  por mi culpa, mi amigo fue agredido.

-Ya te dije que estoy bien  -Shinnosuke llegó al comedor sin que nadie lo notase-  y no te iba a dejar solo... ¿queda pizza? el olor me abrió el apetito.

-Gracias Shinnosuke,  -Asami le extendía una caja de pizza-  sin tu mensaje, no los hubiésemos encontrado a tiempo.

-¿Qué mensaje? -Misaki preguntaba, mientras servía té para su amigo-.

-Shinnosuke le envió vuestra ubicación a uno de los guardaespaldas, gracias a eso, supimos dónde estaban.

-¿Y cómo es que tú tienes los números de los guardaespaldas?  -el castaño pregunta con los ojos entrecerrados-.

-Cariño, deja que tu amigo coma,  -lo atrae y lo sienta en sus piernas-  yo, antes de viajar, le pedí que estuviese pendiente de ti y le di los números de móvil dónde podía ubicarnos, no estuve desacertado en mi decisión,  -lo abraza con fuerza-  gracias a eso, evitamos algo peor.

-En cuanto ese hombre te apuntaba con el arma,  -hablaba sin dejar de comer-  envié un mensaje al guardaespaldas que estaba en Japón, sólo esperaba que supiese qué hacer, ya que con los nervios no se me ocurrió enviar ni un mensaje con un S.O.S y no sabía que Asami-san ya había llegado.

-Quería darle una sorpresa a Misaki  -le besa la mejilla al castaño-  y la sorpresa me la llevé yo.

-Hay algo más que debes saber,  -el castaño se rascaba la cabeza con su dedo índice-  tal vez Shinnosuke tenga problemas con su superior, para salir temprano ayer, le mentí diciendo que necesitaba su ayuda en algo relacionado al proyecto.

-De eso no os preocupéis,  -Asami sonreía divertido, su castaño le ha dado más de una sorpresa esa noche-  tú, como asistente de Kirishima, puedes hacer lo que estimes conveniente, a los únicos que tendrías que avisarnos es a nosotros y lo que habéis logrado con esta "investigación", se les recompensará, para empezar pueden descansar toda la semana que viene, sirve para que os recuperéis de los golpes, sobre todo tú Shinnosuke y vuestros móviles os los traerán mañana, por lo que vimos, ese hombre los destrozó al verse nervioso por nuestras constantes llamadas.

-Gracias Asami-san,  -el pelinegro inclina su cabeza-  descansar si lo acepto, pero no es necesaria una compensación, el que hizo toda esa investigación e ideó ese loco plan, fue Misaki, yo sólo le secundé.

-Yo no necesito nada, ni descansar,  -el castaño se apresuró en hablar-  sólo tengo el labio lastimado, pero Shinnosuke sí debería y mañana pensaba ir al centro comercial a por nuestros móviles.

-Misaki, la última vez tuve que obligarte a descansar,  -Asami le alzaba una ceja y sonreía sutilmente-  no dudaré en hacerlo otra vez y se les compensará porque gracias a vosotros, se evitaron grandes pérdidas a la empresa y ademas, todas estas noches han ido al casino y han tenido gastos ¿o me equivoco?

-Pero...

-Pero nada Misaki, prometiste no sobre esforzarte  -Asami repiquetea con los dedos sobre la mesa-  y llevas toda la semana sin descansar adecuadamente, nos pides a nosotros descansar y cuidarnos, pero tú no estás predicando con el ejemplo.

-Venga Misaki,  -Shinnosuke intenta que acepte-  nos sirve para ir a la firma del último tomo de The Kan, Ijūin-sensei estará muy feliz de verte.

-Entonces sí,  -Misaki en cuanto oyó The Kan, se le iluminó el rostro-  desde que me fui de la editorial no he visto a sensei, acepto descansar unos días.

-¿Quién es Ijūin-sensei? -ese nombre le suena, Asami estaba celoso, Misaki está muy contento de ver a ese hombre-  ¿y por qué se pondría feliz de verte?