ÓPTIMA PARA VENIR AL MUNDO

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18 de marzo, Misaki cuenta con 37 semanas, ahora junto a Asami, están en la consulta de la doctora Aoki, ven atentamente la pantalla, mientras la sensei realiza la ecografía y les explica, cómo va todo.

-Tu pequeña, ya tiene la cabeza encajada en el canal del parto,  -les señala con el lápiz en la pantalla-  de ahí tus molestias.

-¿Y el sangrado?  -Asami un poco alarmado-.

-Se debe a que el cuello del útero empieza a dilatarse y dará comienzo a las contracciones, siempre que el sangrado sea sólo manchitas o hebras de sangre, es normal,  -sensei se explica- pero si es un sangrado abundante, es motivo de alarma y tienes que venir de inmediato.

-¿Esas contracciones no son señal de que ya es el parto? -el castaño está un poco asustado-  aún faltan 3 semanas.

-No te preocupes,  -la doctora ve la ansiedad de Misaki-  es normal, sólo si son frecuentes y has roto la bolsa amniótica, es que la pequeña viene en camino, además ya no es un bebé prematuro, las pruebas han demostrado que tu princesa está óptima para venir al mundo.

-Igualmente, me gustaría que aguantase a término  -Misaki hace un puchero-.

-Y a mi  -Asami le acaricia la pancita-.

-¿Han decidido el tipo de parto?

-Lo estuvimos hablando  -el castaño responde, mientras el ojimiel le ayuda a limpiar su vientre-  y nos gusta la idea de un parto natural.

-Perfecto,  -la doctora apunta en su ordenador-  tenemos una opción de parto natural, que me atrevo a ofrecérosla, ya que Misaki lleva un parto normal, sin complicaciones y este es el parto piel con piel.

-¿Qué significa piel con piel?  -Asami interroga-.

-Si el estado clínico no cambia, el día del parto,  -sensei se explica-  madre y padre, son ingresados en una habitación preparada para dar a luz, aclaro, no es un quirófano, se busca que el entorno sea acogedor.

-¿No es peligroso?  -Misaki es renuente aún-.

-No, cómo te dije antes, tu embarazo es clínicamente perfecto,  -la doctora continúa-  el parto piel con piel, consiste en colocar al recién nacido en el momento del nacimiento sobre la piel de su madre, en su pecho, no se le seca, se le cubre con una toalla y se le  coloca un gorro, no se les separa en ningún momento, se realizan todos los controles del bebé, mientras está sobre su madre, incluso el corte del cordón umbilical se retrasa al máximo.

-¿Qué se busca con eso?  -el ojimiel está interesado-  y ¿yo puedo estar presente?

-Sí, es más, está recomendado,  -sensei sonríe-  el recién nacido, les reconoce, vosotros sois conscientes de ello, no se busca nada en particular, sólo no romper el lazo tan de repente, se ha demostrado que ese contacto, mejora notablemente las constantes vitales, el recién nacido pierde menos temperatura, su frecuencia cardíaca se normaliza antes al seguir escuchando el latido del corazón de su madre y el nivel de azúcar se regula, está más tranquilo y seguro, favorece la lactancia materna y el buen agarre, ayudando a su desarrollo neurológico, psicológico y sobretodo emocional, ya que se crea un vínculo irrompible.

-¿Cuánto tiempo dura este contacto?  -Misaki ya está emocionado-.

-Mientras las condiciones clínicas de ambos lo permitan, hasta que se desee, no hay límites.

-¿Yo también podré cargarle?  -Asami está igual que el castaño-  ¿tendré que llevar bata del hospital?

-Podrá cargarle y no, no llevará bata, es más, ninguno portará nada en la parte superior, el contacto tiene que ser directo con la piel.

Misaki mira a Asami, ambos están emocionados con la idea y sonríen asintiendo.

-Nos gusta esa opción,  -ambos asienten-  la elegimos.

-Lo apuntaré en vuestro historial,  -Aoki-sensei teclea en el ordenador-  así, el día del parto, os ingresarán en una habitación habilitada.

-Gracias sensei  -Misaki inclina su cabeza-.

-Recuerda traer siempre contigo tu cartilla del embarazo,  -deja de escribir en el ordenador-  tu documentación y también es conveniente que tengas lista la maleta con las cosas del bebé y las tuyas.

-Ya las tenemos en la camioneta  -se apuró Asami en responder-.

-Eso está bien,  -la médico mira al castaño-  ahora te queda esperar, tómate estas semanas para descansar,  -mira ahora al ojimiel-  disfruten como pareja, salgan a cenar, al cine, pronto tendréis a vuestra pequeña en brazos y echaréis de menos esos momentos.

-Ya lo tenemos claro,  -Misaki se muerde el labio-  durante un par de meses, todo nuestro tiempo, será para Sayumi.

-No dudéis en pedir ayuda, nadie nace sabiendo ser padre o madre.

-Mi cuñada nos ha dado algunos consejos, el curso de preparación del parto...

-También hemos ayudado  -interrumpió Asami-  con los bebés y niños de la institución, eso nos ha dado algo de experiencia, pero aun así, nos asusta...

-Equivocarnos  -Misaki interrumpe a punto de llorar-.

-Asami-san, Misaki,  -Aoki-sensei suspira y les sonríe, conciliadora-  seréis unos excelentes padres, muestra de ello es ese "susto" que demostráis abiertamente, estoy segura que la pequeña Sayumi, mejores progenitores no pudo elegir.

Asami abraza al castaño, que llora sobre su pecho, besó sus cabellos e hizo una inclinación con su cabeza, dedicada a la doctora.

-Gracias doctora Aoki.

-Por nada,  -pone sobre su escritorio un pen drive-  Misaki, aquí están las imágenes de hoy, te veré la próxima semana.

-Gracias,  -el castaño guarda el dispositivo en su bolso, saca un sobre y mira al ojimiel-  Sensei...

-Dime  -mira el sobre que le extiende el castaño-...

-A Misaki y a mí,  -continúa Asami-  nos complacería, que nos acompañase el día de nuestra boda.

Aoki-sensei coge el sobre y hace una pequeña inclinación, lo abre y se queda con la boca y los ojos bien abiertos, recupera la compostura y se dirige a la pareja.

-Será un placer acompañarles en su día...  -la doctora pone cara complicada-  pero no es muy apresurada la fecha, lo digo por la pequeña.

-Esta será una boda íntima,  -el castaño responde emocionado-  sólo nuestras familias, amigos y allegados.

-Gracias por considerarme parte de ese selecto grupo.

-Usted no sólo es mi médico,  -Misaki sonríe-  también es mi consejera, la considero una amiga.

-Y no hay que olvidar  -intervino Asami, al notar el estado de la doctora-  que usted será la doctora de los siguientes embarazos.

-Cierto,  -Aoki-sensei ríe al recordar-  vosotros tendréis una familia enorme.

-Con mascota y todo,  -aporta Misaki, también riendo-  aun no decido si un perro o un gato.

Los tres rieron, al rato dieron por terminada la visita, el futuro matrimonio iba en la camioneta, camino a la oficina, el castaño insiste en seguir trabajando, aludiendo a que se encuentra bien, Asami se acerca a Misaki y le besa la mejilla.

-Si hay que elegir una mascota,  -el ojimiel sonríe juguetón-  yo quiero un perro, tú eres el único gatito que se mete en mi cama y me rasguña.

-Y al único...  -acunó el rostro de Asami, entre sus manos, para mirarle de frente y le lamió repetidamente-  que le das tu leche.

-Tienes exclusividad,  -pasó su lengua por los labios del castaño-  gatito descarado.

Misaki sólo sonríe de medio lado y asiente con la cabeza, antes de besar a Asami... era un beso lento, tierno, no buscaba nada más que disfrutar del cálido contacto.

Y... Por qué no?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora