Lie to me - Capítulo 46

2.7K 234 53
                                    

|Fugitiva|


Cuando la familia completa amaneció, yo ya había preparado el desayuno y los esperaba cambiada y abrigada, con los bolsos preparados para el campamento. Mis hijos se iban todo el fin de semana afuera, la mascarada perfecta para mi plan de escape. Cuando volvieran, ya tendría todo resuelto.

David bajó las escaleras y entró en la cocina en silencio. Me miró ir y venir sin decir una palabra y yo me movía como si no estuviera allí. Cargué los bolsos en la camioneta, aunque salieran a la tarde. Los esperé ahí mientras se despedían de su padre. Los tres se acomodaron en el asiento trasero y arranqué acelerando antes de que él subiera a la coupé.

44 horas.

Vagué por la ciudad buscando una respuesta a mis plegarias, un milagro que me salvara. La decisión que tenía que tomar y no me animaba. Patear el tablero, mandar todo al diablo y tomarme el primer vuelo que saliera rumbo a Los Ángeles. Quedarme, enfrentar las consecuencias de mis actos, salvar mi familia y mi matrimonio. Me bajé en la Dársena 2 y recorrí la Riviera Oeste del Támesis. Podría haber ido a hablar con Dinah, con Normani o Robert. Pero que podía decirles, o mejor aún, que podrían decirme ellos a mí. Demi seguía mandándome mensajes para confirmar la llegada del vuelo.

40 horas.

Pasé el resto del día en la calle del colegio, esperando que mis hijos salieran para abordar el autobús que los llevaría al Parque Nacional DS, en el camino a Stone Heads.

36 horas.

Los niños salieron del colegio y los ayudé con sus bolsos. Dylan y Dámian se despidieron rápido, mientras Drew permanecía a mi lado como un Golden Retriever.

–Puedo quedarme contigo si quieres.

–Estaré bien.

–¿Estás segura? –Sonreí para convencerlo.

–Sí, mi cielo. Ve y juega un rato a ser niño.

–Dejaré el celular encendido para que me llames –Revolví sus bolsillos y saqué el teléfono que les dábamos para emergencias. Lo guardé en mi abrigo y me arrodillé junto a él.

–Estaré bien. Te lo prometo.

–Mamá...

–¿No me crees? –Me acarició la cara y me abrazó, aferrándose a mi cuello como si sintiera que no iba a volver a verme. Hundió la cara en mi pelo e inspiró profundo.

–Te quiero –susurró. Lo apreté en mis brazos con fuerza desesperada hasta que se quejó.

–Yo también hijo, yo también –Dejó un beso en mi mejilla y caminó como un condenado a muerte hasta la puerta del autobús.

Mientras se alejaba y veía a mis tres hijos saludarme desde la ventana trasera, los latidos de mi corazón comenzaron a temblar sin sentido. Miré el reloj en mi teléfono. Eran las cuatro de la tarde, las ocho de la mañana en LA. Faltaban exactamente 36 horas para el estreno de la película.

El cielo me envió un mensaje que movió las fuerzas inexplicables que me dominaban. El cielo, o una de sus ángeles, Lauren Jauregui su nombre. Sus palabras fueron lo que necesitaba para terminar de tomar la decisión.

"Todo brilla. Tendrías que estar aquí."

Mi mente se desconectó de mi cuerpo y esa otra fuerza inexplicable y desconocida tomó el control de mí. En menos de media hora estuve en mi casa. Busqué el bolso que tenía preparado y escondido, mientras llamaba con carácter de urgencia al aeropuerto. Caminaba por la casa como un perro enjaulado mientras trataban de ubicarme en un vuelo hacia Los Ángeles.

Lie to me - Camren G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora