The Walking Dead Serie - Novela Daryl Dixon (Norman Reedus) y tú

Capítulo 158: "Te amaré siempre"

Último párrafo del capítulo 157: "Serás él último hombre sobre la tierra"

Y de pronto sentí como si estuvieras a mi lado, mirándome, sonriendo, y era como si escuchara tu voz diciéndome "...Serás el último hombre sobre la tierra... lo eres...", y luego como tu voz desaparecía lentamente. Las lágrimas inundaron mis ojos, – Te amaré siempre ______, siempre y jamás te olvidaré, jamás – dije entre pensamientos y sencillamente no hice nada, no me moví, simplemente me quede ahí, pensando como toda mi felicidad se derrumbaba, como ya no vería tu sonrisa, tus ojos, como ya no besaría tus labios... Simplemente lo había perdido todo y no quedaba nada... Yo ya no era nada sin ti.

¿FIN?

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La historia continúa...

Narra Daryl

Había amaneciendo y poco a poco la luz alumbraba todo el lugar. Había permanecido toda la noche bajo la lluvia, ahí, de rodillas frente a tu cuerpo calcinado. Nada me importó, simplemente no quería alejarme de ti. Mi ropa estaba con algunas manchas de sangre, la razón, el fuego había atraído algunos caminantes y estos iban a atacarme. Quizá hubiera sido lo mejor y hubiera muerto, pero simplemente necesitaba descargarme, desahogar esta rabia, así que me levanté y los maté, uno por uno.

Después que lo hice, volví al lugar donde estabas, me arrodillé y me quedé ahí, sin pensar en nada, sin moverme, solo sintiendo la lluvia caer sobre mi rostro y mojarme por completo durante toda la noche. Además, me quedé esperándote, me quedé creyendo que habías escapado y que volverías a despertarme de esta pesadilla, despertarme con un abrazo y un beso, pero no lo hiciste, no volviste, debía admitirlo, estabas muerta y eso me dolió aún más. Veía la cabaña arder, pero poco a poco la lluvia apagó el fuego y no quedó nada, aunque la estructura se había mantenido en pie, todo estaba quemado.

Me levanté, con cuidado entré a lo quedaba de la cabaña, levanté algunas tablas y encontré tu mochila, estaba quemada y no había nada. A lo lejos y debajo de una tabla encontré la cajita de música que te había regalado, la abrí y noté que el vidrio estaba rajado. Moví algunas tablas más y encontré tu cuchillo, uno de tus machetes y una pala, observé el lugar y no había nada más que rescatar. Salí y dejé las cosas junto a mi mochila, ahí estaba Lucky sentado, mirándome. Lo miré, no sabía si comprendía todo esto pero quizá si porque no se había alejado de mí en toda la noche.

Saqué las tablas que estaban sobre tu cuerpo, lo hice con cuidado y me detuve cuando vi todo tu cuerpo calcinado, cerré los ojos y los puños, el dolor que me invadía era demasiado. Quité el otro machete que sostenías con tu otra mano y la dejé a un lado. Cogí la pala y comencé a cavar un hoyo en la tierra. Algo dentro de mí no podía creer lo que había sucedido y lo que estaba haciendo, estaba cavando tu tumba. No recordaba un dolor tan grande y cada vez que sacaba la tierra sentía una punzada en el corazón que me mataba lentamente.

Al terminar, me acerqué a tu cuerpo, lo cargué y el simple contacto me hizo estremecer. Miré hacia otro lado, ni siquiera era capaz de mirarte, no quedaba nada de ti. Con cuidado y con lágrimas en los ojos, te puse en el hoyo que había cavado y comencé a echarle tierra.

Al terminar, traje mi mochila y tus cosas y me arrodillé ante tu tumba, Lucky se puso a mi lado y se sentó. Recordé que había escuchado a Hershel leer algo de la biblia o decir algunas palabras cuando se enterraba a alguien, pero simplemente no pude decir nada, tenía miles de pensamientos dando vueltas en mi cabeza y solo me quedé mirando tu tumba por unos segundos. Acaricié a Lucky, él se acurrucó a mi lado y lo escuché aullar, sabía lo que había pasado y sentía mi dolor. Respiré hondo, – Lamento el no haberte cuidado lo suficiente... Lamento no haber podido encontrar al grupo... – dije en voz alta – Pero te agradezco por haberme hecho la persona más feliz del mundo y por haberme dejado a Lucky – lo miré, – Lo cuidaré, te lo prometo – te dije.

Cogí mi mochila, al abrirla me di cuenta que aún tenía el arma de Rick y el reloj de Glenn, dos latas de conserva, dos botellas de agua y el mapa. Guardé la cajita de música, tus machetes y tu cuchillo. Saqué la cadenita que había guardado en mi bolsillo, la entrelacé en mis manos y simplemente sentí como varias lágrimas caían por mis ojos.

"...Lo más valioso para mí es que tú me diste esta cadena, la escogiste para mí, y tu corazón y el mío están juntos... Mi lindo arquero... Te amo Daryl..." recordé tus palabras y sentí un golpe en el corazón. Respiré hondo, me levanté, me puse mi mochila y cogí mi ballesta.

– Te amaré siempre... Te lo juro – dije en voz alta, guardé la cadenita en mi bolsillo. Miré a mi alrededor, no había nada, ni un ruido, ni un caminante, ni una esperanza, ni nada porque luchar. Miré por última vez tu tumba, – Me hubiera encantado dejarte una flor – dije sintiendo un nudo en la garganta, miré al cielo y simplemente me di media vuelta y comencé a caminar alejándome del lugar junto con Lucky.

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Hola lectoras :D La emoción que siento en este momento es demasiado. ¡Gracias!

Hoy es cumple de Norman *se desmaya :D Y comenzamos la 2da temporada de la novela... Ahh gritaré de la emoción y al mismo tiempo lloraré. U_U

PDT: He leído sus comentarios y reacciones sobre el posible "Caryl"... Aclaro que jamás puse donde lo besó O_O No dejen volar su imaginación tanto... jjajajjaja :D Tranquilas, creo que por la memoria de rayita no le haría eso. ♥ Daryl siempre de rayita ♥

Dejo dos capis, disfrútenlos c: