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Amigos y rivales (6)

El número uno en ventas de libros de autoayuda y profesor de habilidades  literarias tipo agua Martín West ya estaba en la sala de clases cuando el resto de los alumnos comenzó a entrar lentamente con un atraso de pocos minutos.

— Esto es terrible —Dijo West, mirando a Savicevic, quien hacía una discreta entrada a la sala— ¿En qué parte del mundo sobrevive esa supuesta puntualidad europea disfrazada de ostentación de superioridad? Parece que aquí no, evidentemente no.

— Yo no soy Europeo y llego temprano, profesor —Le respondió Ray Perez.

Tom Mc Carty descubrió que el profesor lo miraba fijo. También descubrió que Hans Wörns lo miraba fijo y todo aquello era culpa de haberse quedado chateando hasta tan tarde después de haber regresado de la casa de su amiga.

— ¿Que pasa amigo? —Le preguntó Kate Miller— ¿Estás bien?

— Después te cuento, amiga —Le respondió Tom, aún mirando como Hans lo miraba.

Martín West miró el ránking por última vez antes de concentrarse en la clase nuevamente.

— Supremacía no primer mundista, por lo que veo en la competencia. ¿Que diablos pasa con los europeos? ¿Como va a estar Bosnia Herzegovina por sobre ustedes?

— Tal vez es por el frío de acá —Dijo Catalina, no muy en serio mirando a Mak para que se acercara— Es muy difícil adaptarse a estas temperaturas.

— ¿Usted es Marchessi verdad?

— Así es, profesor.

Martín West tenía ganas de decirle algo malo y sin embargo se quedó con las ganas, puesto que sus blancos predilectos eran otros en ese momento.

— ¿Que pasa? —Le preguntó Mak, en voz muy baja.

— ¿Dónde estuviste ayer?

— ¿Por qué?

— Cauldfield nos mandó a decir que teníamos que quedarnos ¡Ayer se estuvieron formando los grupos!

— ¡Silencio atrás! —Ordenó West.

Pensando en qué tal vez era evidente que iban a haber competencias por equipo en algún minuto, Mak Savicevic se consideró bastante estúpido por no haber contemplado antes aquello.

— Muy bien —Dijo West— Pregunta… ¿Ya hay grupos formados aquí o aún tienen esa estupidez de nervios de los primeros días de clases? ¿Superaron ya o no esas estupidas barreras culturales?

— Ya hay algunos grupos formados —Contestó Catalina, mirando a Mak.

Mirando el suelo, Mak Savicevic intentó comunicarse inmediatamente por mensajería con Rob Irwin, quien no daba ninguna señal de vida. Por si fuera poco Hakan Mastouri tampoco estaba y a Reno Cauldfield no lo había visto desde ese día.

— Eso es muy bueno para quienes lo tienen y eso es muy malo para quienes no. ¿Algún grupo de 4 o 5 que ya esté formado?

Tras hacerle un gesto a Fanny Silverstein, Lena Smith fue la primera en levantar la mano. Ian Cauldfield les había dicho que Martin West iba a ser el encargado de formar los equipos cuyo ideal era que duraran para toda aquella estadía en la academia.

— Cuénteme, joven promesa.

— Nosotras somos cinco —Respondió Lena Smith, optando por incorporar dos chicas bajo perfil en su grupo, tras conversarlo ampliamente con Fanny Silverstein y Constanza Müller.

— ¿Quienes nosotras? Levanten la mano.

Lana Smith, Fanny Silverstein, Ana Izmailova, Constanza Müller y María Jugovic levantaron la mano.