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Citas y competencia (17)

Jessica Córdoba y Javier Busquets se habían ido al patio durante el entretiempo de la clase de habilidades literarias tipo fuego. Ella no dejaba de abrazarlo y besarlo y él ahí estaba, no dando crédito a qué gracias a aquella hazaña de al fin haber obtenido puntos, poco menos que ya era un alumno oficial de la academia.

Le sentaba bastante bien aquel estatus, pese a todo.

— Te amo —Le dijo Jessica Córdoba, agarrándole algo que sobresalía de su entrepierna y haciéndole un breve masaje por encima del jeans—. Te la chuparía aquí mismo.

Javier miraba la nada. Simplemente no podía dejar de pensar y reflexionar en las cosas que se podían venir de ahí en adelante.

— Mak y Kate estuvieron increíbles —Hablaba Jessica—. Me parece que deberíamos ir a invitarlos a alguna parte para celebrar ¿No te parece?

— No sé si sea necesario —Respondió Javier, pensando en qué gracias a haber obtenido puntos iba a tener que desembolsar aún más dinero.

Luego recordó que Sonia le había entregado dinero para esos fines y se sintió mucho más tranquilo.

— ¡Por supuesto que es necesario! —Exclamó Jessica, nuevamente agarrando sus partes— Te amo, maldito ¿Lo sabías?

— Si lo sé —Dijo Javier, rodeando su cuello con sus brazos mientras ella hacía lo propio con su cintura.

Mientras Jessica ronroneaba, Javier Busquets sacaba cuentas alegres tras sus reflexiones, tomando en cuenta que por fin se acercaba al objetivo, que consistía en ganarse la confianza de su compañero. Si bien no se consideraba amigo de Mak Savicevic, con aquella hazaña lograba acercarse aún más a cumplir con aquello.

— No es mala idea lo que se te ocurrió —Dijo Javier—. Siempre le tuve fé a ese maldito winner y me alegro bastante de que no nos haya fallado ¡Tenemos que saber recompensarlo!

— Por eso mismo hay que celebrar. Tú deberías follarte a Kate en agradecimiento y bueno... En tu caso... Espero que no te moleste si se la chupo a Mak Savicevic. El pobre se merece que una buena mujer como yo lo trate bien sin exigirle ni compromiso ni esas porquerías.

— No podría estar más de acuerdo —Le dijo Javier, de pronto soltándola— ¿Te parece si regresamos a clases?

— ¿A clases? ¿No te parece que es mucho mejor idea irnos a tu casa así a celebrar nuestros primeros puntos?

— ¿No querías invitar a Kate y a Mak a follar con nosotros?

— Tienes razón —Dijo Jessica, de pronto acomodándose el escote.

Camino al salón de clases se toparon con Kate Miller y Jessica se le acercó inmediatamente.

— Preciosa —Le dijo amablemente en cuanto estuvo frente a ella— ¡Te quería dar las gracias!

Abrazó directamente a su compañera, quien se entregó con entusiasmo a aquella muestra de cariño. La una a la otra se felicitaban casi sin parar.

— Estoy buscando a Mak —Dijo Kate— ¿Lo han visto por ahí?

— La verdad es que no —Respondió Javier Busquets—. Yo también lo estoy buscando y no lo encuentro.

En eso Kate miró que tanto Rob Irwin como Reno Cauldfield más Hakan Mastouri iban camino al campo de tenis y sin saber muy bien por qué casi como que le dió vergüenza ir y seguirlos.

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Echado en el pasto y con aquel hachís entremedio de sus dedos, Hakan Mastouri realizó aquella llamada de rigor.