Cedric
Había pasado un mes desde que estuve en la ciudad y estaba listo para volver. Había hablado con Ben y me quedaría con ellos unos días, mientras terminaban con las reparaciones de la casa.
En un primer momento, mis padres creyeron más conveniente, alquilar un apartamento, pero ahora quieren que me mude a la antigua casa de mi padre. Eso conllevó contratar algunas personas para arreglar los servicios eléctricos, de agua y un par de daños que surgieron por el tiempo en que estuvo deshabitada.Hubo momentos en los que creí que debería retrasar aún más la vuelta, pero en una semana las clases comenzaban a dictarse y debía estar allí.
-Debes cortarte el cabello cariño, lucir un poco más formal. -eso no pasaría, al menos no aún.
-Seguramente lo haré en estos días mamá, con todo lo de la mudanza y los arreglos, no he tenido mucho tiempo para preocuparme por mi apariencia. Aunque tampoco estoy tan mal. -incliné mi cabeza, dándole una de las sonrisas que sabía que le gustaban.
-Me gustaría irme contigo, no será sencillo para ti.
-La manada los necesita aquí, además estaré bien mamá, allí esta Ben, Summer e incluso podría visitar a Susan. -ni loco iba a permitir que mis padres me siguieran.
Me gustaba hacer las cosas a mi manera, con dificultad lo lograba aquí, no los dejaría seguir controlándome también allí.
Tenía pensado lo que haría, había armado una agenda nocturna que cumpliría religiosamente, al menos, las primeras dos semanas.-Hablando de eso tengo unas cosas que debes llevarle, las tengo preparadas, solo recuérdamelo. -Puse los ojos en blanco, no me iba aún y ya estaban dándome trabajo.
Hablando de trabajo, no descartaba la idea de buscar algo para hacer allí. Había pensado pedirle a Beau, pero mis visitas a infierno serían más placenteras que otra cosa.
La última vez que estuve allí, me impresionó una de las bailarinas. Era imposible que olvidará su nombre, ya que Laurie casi me arranca la cabeza en cuanto se lo pregunte.No entendía que podía tener en contra de Christa, cuando al verla se veía tan inocente.
Lo bueno es que ahora iba a tener tiempo para poder conocerla mejor.-Tranquila mamá, lo haré, confía en mi. -soné confiado, pero no había forma de que se lo recordara.
Pase todo el resto del día, terminando de empacar. Tenía que terminar antes de la cena, ya que mis padres habían organizado una pequeña despedida y mañana no podría hacerlo, ya que saldría a primera hora.
Una vez tuve las cosas listas, me tiré en la cama a molestar un poco a Laurie.*Cedric: ¿Camino al trabajo?
*Laurie: Sabes que sí, ¿Por qué preguntas?
Ok, hoy al parecer no estaba de muy buen humor. Pero eso nunca me detuvo antes.
*Cedric: Curiosidad. ¿Qué anda pasando enana?
*Laurie: No me digas así. Tuve un problema con el apartamento, pero no les digas a mi padre.
*Cedric: ¿Qué paso?
*Laurie: Exploté el microondas. Por suerte estaba en la sala, pero provoco bastantes problemas.
¿Qué demonios trató de hacer? Ella sabe lo peligroso que puede ser jugar con los electrodomésticos.
*Laurie: Recuerda no decirle a mis padres.
*Cedric: ¿Qué rayos hacías? ¿No aprendiste nada de Sophie?
*Laurie: Fue un accidente, puse una lata por culpa de Beau, él me distrajo.
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Pocas pulgas
WerewolfLibertad... Laurie Adams había ansiado llegar a la ciudad desde pequeña. Las cortas escapadas que hacia junto a sus padres para visitar a sus abuelos, no eran suficientes para satisfacerla. Pero ahora con dieciocho años recién cumplidos y lista para...