459. La Paz Con Ellos

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Le seguía pareciendo muy extraño estar allí.

Volver a recorrer aquellos metalizados y solitarios pasillos, cruzarse con las mismas caras familiares de siempre haciendo guardia. Sentir aquella calma que casi siempre en Arkadia precede a la tormenta. En definitiva, regresar a "casa".

Aquello era algo en lo que Lincoln jamás pensó.

Se había cruzado con un par de guardias conocidos que le habían dado la bienvenida haciendo sus rondas por el pasillo, también con algunos flokrus en el salón comedor que le conocían de su tiempo en la plataforma y algún que otro trikru que estaba allí prestándole su ayuda para preparar el desayuno ya que por turno les correspondía a ellos aquella mañana.

Era muy temprano aún pero el turno debía comenzar pronto pues ahora habían demasiadas bocas en Arkadia que alimentar.

Lincoln se alegró de ver que su marcha no había sido impedimento alguno a la hora de que skykrus y floukrus iniciaran buenas relaciones y una convivencia cargada de armonía y unión.

Todo parecía marchar bien, mucho más que bien y eso le agradaba.

Octavia le había convencido en unos pocos minutos tras el encuentro con Aden para que fuese a anunciar su llegada a Luna personalmente. La Canciller estaba convencida de que la floukru perdonaría su falta, y se consagraría con su llegada.

Lincoln había preguntado sobre Luna a los floukrus del comedor que le habían indicado cual era la habitación que Luna compartía con Derrick dentro del Arca. Todos se alojaban allí por el momento hasta que terminasen las instalaciones fuera para compartir las tierras y la convivencia.

Lincoln se dirigió hacia allí y al llegar tragó un poco al llamar a la puerta.

La tormenta se desataba fuera y podía escuchar en parte como frías ráfagas de viento se colaban por entre los resquicios de las abiertas entradas y puertas.

Tras no recibir contestación, Lincoln se dio la vuelta para marcharse creyendo que la habitación estaba desierta pero fue entonces cuando escuchó la puerta abrirse.

Derrick que parecía algo somnoliento apareció en la entrada y cuando sus ojos se encontraron con la presencia de Lincoln, su rostro cambió súbitamente.

—Hola Derrick —se atrevió a saludar Lincoln quedamente no sabiendo como enfrentar bien aquella mirada, la situación quizás le sobrepasaba un poco—. Antes de que puedas decir nada, lamento mucho la vergüenza que traje a vuestro clan. Jamás tuve la intención de hacer el daño que sé que hice y es algo que jamás me voy a perdonar, pero necesito que vosotros entendéis que fue una situación bastante dura y que no fue fácil para nosotros atravesarla.

Derrick que se le quedo viendo largamente en silencio, no pudo evitar sentirse traicionado. Él y Luna le habían acogido bajo su techo en innumerables ocasiones y nunca antes, se había sentido tan vulnerado como en aquel momento anterior.

—Confiábamos en ti, Lincoln —dijo Derrick tras unos segundos de silencio—. Luna confiaba en ti, y tú nos fallaste.

—Lo sé, y no hay nada que pueda hacer para enmendarlo salvo ponerme a vuestra disposición —respondió Lincoln bajando ligeramente la mirada con arrepentimiento—. Solo quiero la oportunidad de poder seguir adelante y dejar todo esto atrás.

Derrick que busco su mirada dio un paso hacia delante.

—Lincoln, si te la concedemos y nos fallas otra vez...

—No lo haré —le interrumpió el guerrero trikru alzando la mirada para enfrentar sus ojos totalmente convencido de ello.

Derrick que guardo silencio unos instantes contemplando aquellos ojos que tantas veces había contemplado, encontró la verdad en ellos y terminó por acercarse ofreciendo su brazo como señal de perdón y respeto.

Lincoln que observó aquel gesto, sintió su corazón darle un vuelco no esperando aquella buena voluntad del guerrero floukru y terminó devolviéndole el gesto, sintiendo como al estrecharlo Derrick unía su hombro al suyo apretando su hombro ligeramente a modo de abrazo.

—Nunca volveré a fallaros, lo prometo.

—Eso espero —dijo Derrick al escucharlo tomando aquello sereno.

Lincoln que se separó miro al líder floukru mirando después hacia el interior del habitáculo en silencio.

—Me gustaría hablar con Luna sobre ello —anunció Lincoln mirando después al guerrero percibiendo aquel silencio.

—Luna no está. Estaba en la torre de vigilancia cuando la vi antes de la cena. Supongo que no podía dormir y por eso no ha venido.

—Iré a buscarla —dijo Lincoln a modo de despedida devolviéndole aquel cálido gesto.

—Le gustará volver a verte —le aseguró el guerrero.

Lincoln que le devolvió aquella serena sonrisa asintió con la cabeza, justo antes de darse la vuelta comenzando a alejarse en silencio.

Sin duda alguna, a él también le iba a gustar volver a encontrarse con ella. Luna no solo era una amiga, era como una guía, una hermana para él, Luna era familia y tenerla de nuevo en su vida sería estupendo.

Todo volvería a ser como antes y Lincoln hallaría la paz con ellos.

Continuara...

Asumamoslo, Ahora Esto Es Lo Que Somos 3 ... (#TheWrites)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora