Asumamoslo, Ahora Esto Es Lo Que Somos 3 ... (#TheWrites)

491. Recuperandote

Eric Jackson, medico del Arca había sido el primero en acudir al llamado de Akeyla. Lexa kom Trikru, Heda de los Catorce Clanes, Comandante de la Sangre y su hermana había despertado algunos minutos antes y su hermana pequeña, había decidido llamar al buen doctor.

Tras comprobar sus constantes, sus niveles de oxigeno en sangre y revisar la herida de su hombro había determinado que se encontraba estable y fuera de peligro por ahora.

La sangre de Luna, otra Natblida y líder del Clan Floudon Kru había surtido efecto y había ayudado a prolongar su bienestar y a recuperar las fuerzas perdidas a ella y a sus pequeños.

Clarke kom Skykru, embajadora del Pueblo Celeste en Polis y legendaria Wanheda, entró rápidamente en la habitación al verla despierta.

-Lexa -susurro aproximándose a la cama donde se encontraba ella pasando por detrás de Jackson que se retiraba tras unos últimos análisis.

La Heda de los Catorce Clanes levantó apaciblemente la mirada y no pudo evitar sonreír escondidamente al verla.

-Has venido.

-Por supuesto, ¿como no iba a venir? -dijo Clarke cargada de amor y desvelo tomando su hermoso rostro entre sus manos no pudiendo evitar besar sus labios con alivio y preocupación-. ¿Como te encuentras?

-Estoy bien, casi no duele -respondió Lexa mirándola a los ojos con amor y anhelo acariciando sus manos las cuales seguían sosteniendo su cara-. Jackson me ha retirado el oxigeno y dice que me pondré bien.

-Eso es estupendo -dijo Clarke con extremo alivio cerrando sus ojos por un momento sintiendo estos humedecerse-. Tenía tanto miedo por ti, por los pequeños.

-Estamos bien -volvió a afirmar ella tratando de tranquilizarla, moviéndose con una pequeña mueca de dolor por su hombro-. He oído lo de Kane, ¿qué ha ocurrido?

-Puede esperar -dijo Clarke volviendo a besarla de nuevo no pudiendo ni queriendo apartar sus ojos de ella-. ¿Seguro que estas bien? ¿no te duele?

-Clarke, cuéntame que ha pasado con Kane -replico Lexa vislumbrando en sus ojos que había algo más que ocultaba.

Clarke que había querido ahorrale detalles desagradables al respecto al menos hasta que estuviese recuperada, se la quedo viendo unos instantes y bajo la mirada.

-¿Qué ocurre, Clarke?

-Hay... hay algo más que no sabes, Lexa -dijo la rubia quedamente no sabiendo como contárselo-. Lincoln ha muerto.

El rostro de Lexa cambio súbitamente palideciendo primero y contrayéndose de desconcierto después.

-¿Ha sido Kane?

-Neil Macallan, el hombre que detuvimos por lo de Harper, ¿recuerdas?

Lexa asintió despacio al escucharla pensando en la de veces que el trikru había luchado junto a ella y lo leal que había sido la mayoría del tiempo. También recordando lo que le había hecho a Clarke en su momento, tensándose ligeramente al hacerlo.

-Octavia se ha vuelto loca, le ha destrozado literalmente -reconoció Clarke bajando la mirada a sus unidas manos con tristeza-. Luego ha decidido matar a Kane y perdonar la vida a Jackson por quedar pocos sanadores en Arkadia.

-¿Ha hecho eso?

A Lexa no le encajaba nada de aquello en el comportamiento maduro y sensato que solía portar la Canciller de Arkadia, la consideraba una líder justa, poco corruptible y de grandes ideales de prosperidad y respeto a la vida humana.

Clarke asintió al oírla y se la quedo mirando.

-Nuestro ejercito ha partido hacia Polis con ella y Derrick, el trakara ha muerto.

-Polis -susurro la Comandante casi para si recordando cual era el fin de la larga travesía que se había visto interrumpida por aquella flecha, haciendo por levantarse.

-Eh, eh -la paro Clarke con sus manos obligándola a volver a acostarse-. ¿A donde crees que vas?

-Polis me necesita, mi gente me necesita Clarke. Halena...

-Estará bien -le aseguro la rubia haciendo que se acomodase de nuevo en la cama-. Sabe como cuidar de si misma y de los demás.

Lexa que cerro sus ojos algo traspuesta y mareada por el brusco movimiento supo que iba a necesitar un tiempo de descanso si iba a querer levantarse y ser útil a sus gentes de nuevo.

-¿Luna?

-Ella está bien, algo afectada por lo de Lincoln pero estoy segura de que se recuperará -insistió Clarke con amor acariciando su pelo-. Ahora duerme algo más, descansa. Yo estaré aquí cuando despiertes, te lo prometo.

La Comandante de la Sangre asintió y permitió que sus ojos se cerraran con confianza sintiéndose aun débil.

-Gracias, Clarke.

-No tienes que darme las gracias por nada Lexa, te quiero.

-Yo también te quiero solo a ti -murmuro Lexa comenzando a ser vencida por el cansancio, los sedantes y el sueño.

Clarke se inclino besando su frente protectoramente y después sus labios sin soltar su mano, sentándose en la silla junto a la cama con ella.

No se separaría mas de ella hasta que la Heda de los Catorce Clanes se recuperase por completo, se prometió a si misma y a ella.

Continuara...