Al finalizar los bailes diversos en los que no participé por no saber de la cultura, la celebración finalizó y los invitados empezaron a retirarse. Tan solo quedó Catalina junto a una pareja adulta.
-Madre, iremos a nuestros aposentos- dijo Isodoro y se retiró junto a sus hermanos.
Cargué en brazos a Napomuceno, meciéndolo para que se duerma, logrando mi objetivo al instante.
-Siéntanse bienvenidos- dijo Juana, mientras caminamos hacia el living para sentarnos en los sillones.
-Gracias por invitarnos, fue una fiesta ideal- dijo una mujer, sentada junto a el señor y a su otro lado Catalina.
-Le queremos presentar una nueva propuesta- dijo Kodran.
-Les escuchamos- dijo la señora.
-Vamos a cancelar el matrimonio entre Catalina y Thanatos- dijo Juana, para luego mirarnos-. Él encontró a su pareja y dejaré que sea feliz. Para no cancelar nuestro trato, les propongo que se case con Isodoro.
-Me opongo- dijo Catalina.
-Querida, no puedes negarte- dijo la mujer-. Estoy de acuerdo.
-El matrimonio se cancela- dijo el hombre.
-Pero mamá, papá...- se quejó ella.
-Luego veremos el asunto de la nueva propuesta, aunque estamos de acuerdo con la primera parte del trato- dijo la madre de Catalina-. El amor es una de las cosas más importantes en la vida y pasar tus días junto a quienes quieres es favorable.
-Pero...- Catalina se estaba por quejar, pero fue detenida por su madre, quien la mandó a callar.
-Hablamos en casa- dijo ella y se levantaron-. Gracias por su tiempo, nos retiramos.
-Fue un placer verles- dijo Juana y nos despedimos.
Catalina se fue sin saludarnos, como una clara seña de enfado.
-Si gustan pueden quedarse esta noche, si se tienen que retirar lo entenderé- dijo Juana, mirándonos con cierto cariño a pesar de su seria actitud.
Thanatos me miró y me encogí de hombros, dándole a entender que la decisión es suya.
-Quedarnos una noche no nos hará daño, supongo- dijo él y su madre sonrió.
-Tu habitación está preparada y se ha agregado otro ropero con ropa "urbana" como la llaman ahora- dijo Kodran-. Imaginé que eso les agradaría.
-Gracias, padre- dijo él, sonriendo, abrazándome por la cintura.
-Vayan a descansar. El desayuno mañana será servido en cuanto caiga el sol- informó Juana-. ¿Me permites a Napomuceno?
-¿Le molesta si nos dejan a cargo de él por la noche?- preguntó mi vampiro, sorprendiéndome.
-Claro- dijo Juana-. Al rededor de la mitad del día suele despertarse para comer. Una nodriza irá a darle de comer.
-Está bien- dijo Thanatos.
-¿En dónde tiene un pijama?- pregunté-. No creo que sea cómodo para él dormir con ropa de fiesta.
-Oh, no te preocupes- dijo Juana, alzando al niño en brazos-. Iré a cambiarlo y en cuanto termine lo llevaré a vuestro cuarto.
-Gracias- dije y seguí a Thanatos, quien empezó a subir las escaleras.
Al llegar al último peldaño, fuimos a su habitación, entrando al inmenso armario.
Al inicio del todo hay ropa más actual, entre ellas jeans, pantalones sueltos, camisas y remeras. Todo es de la talla de Thanatos y son de colores oscuros o neutros.
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La Sirena Terrestre.
FantasiaEl rey de la zona convocó a sirenas y tritones que estuvieran dispuestos a subir a la superficie para poder ver si hay más zonas habitables más allá de lo que podemos ver. Una sirena madre desesperada, ofrece a su hija y esta va a la zona terrestre...