Ooh le llevó una espumeante jarra de cerveza al pelirrojo y la dejó con cuidado sobre la gastada mesa. El hombre la cogió sin demasiado entusiasmado, pues la visita no estaba siendo demasiado agradable y el hecho de que Ooh se le quedara mirando con una gran sonrisa en la cara no ayudaba en nada.
Pero nada más probar la cerveza, todos los malos sentimientos se disiparon como por arte de magia. No solo era que se trataba de era una bebida de gran calidad, sino que estaba echada de una manera excelente. El primero trago fue seguido de un segundo y, casi sin darse cuenta, casi se había bebido la jarra entera.
—¡Está buenísima! ¿Se puede saber de dónde ha salido? Su sabor no me suena... —dijo el hombre.
—¿De dónde viene...? —preguntó Ooh con la voz dubitativa, él la había probado en varias ocasiones desde que se había unido a la tripulación de la tortuhogar, pero no tenía ni idea de dónde había salido —. Pues... el hombre al que se la compré me dijo que venía de... Isla Paradise... —mintió, diciendo el nombre de la primera isla del Archipiélago que le pasó por la cabeza.
Una cara de asombro digna de aparecer en el diccionario junto a la palabra se dibujó en el rostro del pelirrojo.
—¡¿En serio, de isla Paradise?! ¡Entonces no me extraña que esté tan rica! Pero... creo que mi bolsillo no está para esos palos —musitó, pues todos los productos que salían de aquella isla eran carísimos.
—No te preocupes, es barata: solo tres créditos —dijo Ooh, que tampoco quería acompañar a la mentira con estafa.
La cara del pelirrojo se iluminó por una gran sonrisa.
—¡¿En serio?! ¡Esto es genial! ¿Os vais a quedar mucho en la isla?
—No lo sé... la jefa tiene unos asuntos que atender y aunque dijo que no tardaría demasiado no sé si fiarme... —dijo Ooh y en esos momentos tuvo la sensación de que pasaría mucho tiempo antes de que volviera a ver a Muma. De todas formas y a pesar de que la conocía de poco, él no era la clase de persona que huiría, sino que esperaría por Muma todo el tiempo que fuera necesario.
—Pues yo espero que os quedéis una buena temporada... En Acudid los locales que sirven a túnicas Índigo como yo no son las mejores. Me llamo Nadría —dijo el pelirrojo.
—Ooh y mi compañero es Butfais —dijo Ooh.
La puerta volvió a abrirse y Ooh ya se esperaba que fueran más clientes, pero en lugar de eso se encontró con un Agente de Uno. Eso no le gustó, la isla de Antioquía era una de las pocas que no entraban dentro de los tentáculos de Uno y desde siempre hubo cierta animadversión.
—Vaya... ¿Es esto una taberna? —preguntó Miau.
—Claro que sí —dijo Ooh.
—¿Y podría ver la licencia? —preguntó Miau y a Ooh ya no le pareció tan buena idea eso de montar una taberna.
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Muma I (Finished)
HumorUn camión atropella a Muma y, como es normal, muere. Aunque sucede algo extraño: un dios llamado Zaltor le ofrece la posibilidad de recuperar su vida, pero con la condición de que asesine a la villana conocida como la Señora del Terror. ¿Logrará Mum...