91 | Anhelo

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Betty la tomó y ambos se levantaron, Jughead la guió por las pequeñas escaleras hasta el escenario, con la luz del reflector aún siguiéndolos y alumbrando su camino.

- No entiendo nada. -la rubia admitió.

Cuando las luces del escenario volvieron a encenderse, la pareja se vió rodeada por sus amigos, sus hijas y los padres del pelinegro.

Los miró a todos con confusión dando la vuelta completa, pero al volver frente al pelinegro, vió que el tenía un micrófono en sus manos.

- Bueno, te dije que debíamos celebrar nuestro primer aniversario de forma apropiada. -sonrió, mirándola.

Betty rió con sus ojos cristalizados. - Y preparé todo esto para decirte, con nuestros amigos y familia como téstigos cuanto te amo. -admitió. - Te amo como nunca he amado a nadie, eres el amor de mi vida, y una de mis razones para vivir... Porque si digo que eres la única nuestras niñas me matan... -murmuró divertido.

Todos rieron alrededor y las dos niñas se sonrieron, chocando los cinco.

El pelinegro suspiró y bajó su mirada, pensando bien que palabras decir luego. La verdad, si estaba bastante nervioso.

- Quiero que seas tú siempre, Elizabeth Cooper. -levantó su mirada de nuevo para verla a los ojos. - Que este sea solo el primer aniversario de muchos, y que estemos juntos hasta que sea físicamente posible. Eres increíble, ¿Sabes? Y estoy agradecido de que hayas llegado a mi vida para darme otra hija hermosa, porque eso es Sarah, mi hija. -dijo con seguridad. - Y para darle a Val la madre amorosa que necesitaba, y esa eres tú.

- Jug... -ella murmuró. A ese punto, ya las lagrimas salían descontroladamente de sus ojos.

- Esto es tan bonito. -Cheryl murmuró, sollozando dramáticamente en el hombro de su novia quién acariciaba su cabello sonriendo.

- Por eso, amor. -el murmuró, arrodillándose, y sus niñas juntas llegaron para tenderle una cajita.

El les sonrió a ambas y la tomó, abriéndola frente a su novia, enseñando el anillo.

Betty cubrió su cara con sus manos mientras lloraba.

- ¿Quieres casarte conmigo? -el preguntó también con lágrimas en sus ojos, mirándola con anhelo.

La rubia asintió y se apresuró a arrodillarse frente a él, dejando su mano para que el le pusiera el anillo.

- Si quiero. -murmuró entre sollozos.

El sonrió, y la tomó de la cintura para ambos levantarse juntos y unir sus labios en un beso cargado de amor, donde solo eran ellos dos, y así, en medio de su beso, los gritos y el ruido de todos alrededor de ellos desaparecieron completamente.

Cuando se separaron, Betty miró sonriente a su ahora prometido y el limpió sus lágrimas.

- Te amo, Jughead Jones. -ella murmuró en sus labios.

- Y yo a ti, pronto Betty Jones. -dijo algo divertido y besó sus labios una última vez, antes de ser abrazados por sus dos hijas.

- ¡Seremos hermanas! ¡Seremos hermanas! -ambas niñas celebraron al mismo tiempo, como si fuera una canción y los adultos rieron mirándolas.

Todos se acercaron a felicitarlos, y Gladys fue la primera en cubrir a Betty con un fuerte abrazo.

- Felicidades, Betty. -dijo con los ojos cristalizados. - Ahora serás oficialmente parte de la familia, y estoy feliz de que seas tú. -admitió.

- Gracias, Gladys. -ella le sonrió.

- ¡Te vas a casar, estúpida! -Veronica llegó y la abrazó efusivamente cuando Gladys se separó. - Estoy tan feliz por tí... -admitió y la abrazó de nuevo, haciendo reír a la rubia.

- Gracia, V, pero siento que me quedo sin aire. -la rubia admitió divertida.

- Estoy orgulloso de ti, hijo. -Fp admitió abrazando a su hijo y dejando dos palmadas en su espalda.

El sonrió y luego fue Toni quién se acercó. - Mi hermanito se casa. -hizo un puchero. - Ay, ¡Crecen tan rapido! -exclamó dramáticamente.

Al rato, cuando los abrazos cesaron, Jughead tenía a su chica de la cintura, mientras charlaban con sus hijas.

- ¿Y en que momento practicaron ese baile? -preguntó la rubia confundida. - Que por cierto, lo hicieron muy bien. -halagó.

Ambas se miraron entre sí y sonrieron, pero su abuela llegó tras ellas y habló por ellas primero.

- Bueno, todas las veces que estuvieron yendo a mi casa, era para eso. Contratamos a su profesora de la academia para clases extra. -confesó.

Valerie sonrió. - Ya vuelvo. -caminó rapidamente entre la gente y segundos despues volvió con dos mujeres de la mano.

- Hola. -la más jóven saludó sonrojada.

- Elizabeth. -la mujer mayor se acercó a abrazar a la rubia. - Felicidades. Y a usted, señor Jones. -le dijo amablemente al pelinegro.

- Gracias. -el murmuró y ambos le sonrieron.

- Gracias, señora Duboi. -Betty agradeció.

- Mami, nuestra profesora hizo esa coreografía... -explicó acercándose a la pelinegra más alta.

- Estuvo muy hermosa... -Betty admitió.

- Gracias, y felicidades a ustedes. -les sonrió. - Las niñas querían que estuviéramos aquí para ver su baile. -todos los adultos rieron.

- De verdad me siento muy feliz por ustedes. Y estoy orgullosa de que gracias a mi academia y a dos hermosas bailarinas. -la mujer miró a las dos niñas. - Una pareja tan hermosa como ustedes se haya encontrado... -les sonrió con sinceridad.

La pareja se miró y Betty, sonrojada, dejó caer su cabeza en el hombro de su prometido, a lo que todos rieron.























HOLIIII, hay boda bughead.

bueno bye, tengo tarea por hacer JAJSJSJA.

Ballerinas | Bughead | +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora