Ballerinas | Bughead | +18

144 | Solo tuya

Se encontraban de regreso a la casa cuando ya estaba comenzando a anochecer, pero aún había claridad.

Pasaron frente a una casa y Betty enarcó una ceja. - ¿Ahí viven Enzo y Lia?

- Mhm. -el asintió. - Algunas veces se quedan también en nuestra casa, pero realmente la suya es esa. Aunque como ahora nosotros estamos aquí, ellos estarán solo en la suya.

Al llegar, dejaron a los caballos en el establo y entraron a la casa, y mientras Betty se daba una ducha rápida el se dispuso a prepararles una cena.

Cenaron y rato despues, ahora era Jughead quien se duchaba, mientras Betty admiraba la hermosa vista que tenía de parte del viñedo desde el pequeño balcón de la habitación de Jughead.

Sintió dos manos en su cintura y pequeños y lentos besos en su cuello.

- ¿Ya te duchaste? -ella cuestionó.

- Mhm. -asintió en su oído. - Pero no me vestí... ¿Me acompañas a la cama?

- ¿A dormir? -preguntó volteándose entre sus brazos, notando que el solo tenía sus boxers.

- No lo creo. -el negó tomándola de los muslos y entró con ella, cerrando con su pie la puerta del balcón.

Se dirigió a la cama y la dejó frente a esta. - Desnúdate. -le ordenó, mientras el bajaba sus boxers, quedando completamente desnudo frente a ella.

Betty mordió su labio inferior, quitándose el short de su pijama y las bragas, así como la camiseta de él que tenía.

Cuando estuvo desnuda también, el la apegó a su cuerpo y besó sus labios de forma apasionada, sus lenguas luchando entre sí al mismo ritmo, encajando a la perfección como siempre.

Cuando se separó, ya ambos tenían la respiración agitada, y entonces Jughead le habló al oído.

- ¿Me darías placer a mí... Mientras yo te doy a ti? -cuestionó en voz baja, besando su cuello lentamente.

Ella cerró sus ojos con el ceño levemente fruncido con confusión. - ¿C-como? -preguntó algo entrecortada por sus besos.

Jughead sonrió separándose de ella y se recostó en la cama. - Ven aquí, nena.

Ella se sentó en su abdomen pero el negó.

- Voltéate.

Ella lo hizo, quedando sentada de la misma forma pero viendo hacia sus pies, y cuando bajó más la mirada jadeó al ver su miembro que comenzaba a erectarse, ya estaba entendiendo a que se refería él.

- Más arriba mi amor, no tengas miedo. -el dijo algo divertido. - ¿Ya entiendes?

Ella asintió y se elevó un poco para dejar su sexo frente a él, pero sin ejercer todo su peso.

Jadeó al sentir la lengua y el aliento de su esposo ahí, y ante eso sus brazos flaquearon, haciéndola caer hacia abajo.

Betty jadeó, pero enseguida con sus manos tomó el miembro de su esposo, comenzando a moverlas de arriba a abajo y pasando su lengua por la punta.

Y tal como el lo dijo, ambos se estaban dando placer al otro, al mismo tiempo, como sabían que les gustaría.

Escuchando sus gemidos, respiraciones agitadas y los chasquidos de sus lenguas contra el sexo del otro.

- Juggie. -Betty gimió sacando su miembro erecto de su boca cuando el la penetró con dos dedos y se sintió más cerca del orgasmo.

- Sigue. -el pidió con la voz ronca. - No pares Elizabeth. -ordenó.

Ella acató su orden y lo metió de nuevo en su boca, mientras que masturbaba la base con sus manos de forma rápida.

Así continuaron, hasta que ambos se corrieron.

Entonces Betty se dió la vuelta aún sobre el, se sentó de nuevo en su abdomen y se inclinó a besarlo de forma ambrienta.

Pasaron unos segundos besándose, pero ella se separó con un jadeo cargado de placer cuando sintió el miembro de su esposo erecto de nuevo contra sus labios húmedos.

Jughead estiró su mano para tomar el condón y se lo puso, entonces la rubia se elevó y guió su punta a su entrada, dejándose caer solo segundos despues.

Ambos gimieron cuando comenzaron a moverse, sin separar sus labios, con él apretando su cintura entre sus manos y ella subiendo y bajando sobre él.

- Eso... Eres mía. -el dijo en su oído de forma seria, con seguridad. - Solo mía, nena.

- Jug.

- Dilo. -ordenó.

- Soy solo tuya. -admitió en un jadeo.

Ambos se corrieron de nuevo, y mientras la fuerza de su orgasmo pasaba, no dejaron de besarse ni separaron sus labios del otro.

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Holi, no puedo dormir :)