Jughead tomó la mano de su esposa cuando ella estaba entrando al jacuzzi. Luego entró tras ella y se sentó, tomándola de la cintura para dejarla de su regazo.
La abrazó por la cintura y ella dejó caer su cabeza en el hombro del pelinegro, donde respiró y sonrió. - Hueles rico Juggie.
El sonrió acariciando su espalda. - Tu igual.
- Es el perfume que me regalaste en nuestro 4to aniversario. -sonrió separándose para mirarlo a los ojos.
- Te amo, mi nena. -murmuró llevando su mano a la mejilla de ella. - Como a nadie.
- Yo también te amo, mi Juggie. -Betty se acercó a él para besarlo, luego de murmurar. - Muchísimo. -y así lo besó.
Sus labios como siempre comenzaron a moverse al mismo ritmo, al ritmo perfecto, encajando perfectamente entre sí, y ambos sentían exactamente lo mismo: no querían separarse nunca.
Ante la necesidad que comenzaba a crearse en ambos, el la acercó con fuerza de la cintura, dejándola justo sobre el bulto que comenzaba a formarse bajo sus shorts, escuchando un pequeño jadeo que salió de los labios de Betty en medio del beso.
El, que tenía sus dos manos bien puestas en su trasero dejando leves apretones, las subió para desatar la parte superior. Al hacerlo se la sacó por los brazos y la dejó flotar en el agua.
Cuando sus pechos estuvieron desnudos, el la acercó para que los apegara a su pecho también desnudo y separó sus labios para tomar una profunda respiración ya que ambos se estaban quedando sin aire.
Se quedaron mirándo directamente a los ojos, aún cuando bajo el agua Betty sintió como el hizo a un lado la parte inferior de su bañador y tocó su centro.
- Juggie. -jadeó cuando el metió un dedo. - Así, Jug. -dijo mirándolo a los ojos.
El con su otra mano la tomó del cuello acercándola a él y la besó de manera hambrienta, sintiéndola retorcerse levemente sobre el por el movimiento de sus dedos dentro de ella.
Estuvo un rato dándole placer con sus dedos, hasta que la sintió relajarse contra él, avisándole que su primer orgamo había llegado, junto a un gemido que soltó.
Sacó sus dedos del interior de la rubia para quitarse sus propios shorts bajo el agua y Betty imitó la acción quitándose la parte inferior de su bañador.
Jughead la atrajo a él de nuevo, tomando su miembro erecto bajo el agua para guiarlo a la estrecha entrada de su esposa.
Ella se dejó caer soltando un leve gemido al sentirse llena de él.
- Bebé... -el gimió en su oído, con sus ojos cerrados disfrutando de los movimientos de su esposa sobre él. - Dios.
Betty se metió en su cuello, dejando besos y pequeños chupetones y marcas rojas que probablemente se quitarían al pasar de un rato.
Aumentó la velocidad de sus movimientos, cuando Jughead con su mano apretó aún más sus caderas, dejando la marca de sus dedos en su piel, hasta que minutos despues, alcanzaron juntos el climax.
Jughead quitó el cabello de la cara de su esposa y acarició su mejilla mirándola con una leve sonrisa, pero ella notó el cansancio claro en los ojos de su esposo.
- ¿Tienes sueño ya, Juggie? -ella preguntó con la respiración aún levemente agitada.
- Si, amor. -asintió y besó su mejilla. - Estoy envejeciendo, no soporto tantas horas de sexo y mi espalda duele siempre. -dijo algo divertido.
- Eso es porque te estás convirtiendo en mi sugar daddy. -se burló.
El soltó una fuerte carcajada mientras negaba. - Como si no tuvieramos la misma edad.
Ella rodeó sus ojos. - Pero yo si puedo soportar muchas horas de sexo. -le dijo en voz baja al oído de forma sensual.
Jughead gruñó audiblemente y apretó su trasero. - ¿Me estás retando?
- Tal vez... -ella se encogió de hombros alejándose de él para sentarse en el otro extremo del jacuzzi.
El pelinegro relamió sus labios mirándola con deseo y nadó de nuevo hasta ella tomando sus piernas bajo el agua para penetrarla de nuevo sin previo aviso.
- Reto aceptado. -le dijo con voz ronca al oído, para luego bajar su cabeza y comenzar a marcar su cuello, aún embistiendo contra ella bajo el agua, escuchándola pedir más entre jadeos.
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Jughead Sugar Daddy Jones
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Ballerinas | Bughead | +18
FanfictionEl destino se encarga de juntar a una hermosa pareja a través de sus hijas y tal vez un inconveniente sea solo el principio de una hermosa vida juntos. ¿Quién sabe? Jughead Jones y Elizabeth Cooper pueden ser unidos por el amor, y también... Por do...