- De verdad gracias, Toni. -Betty le agradeció a la morena.
- Ustedes no se preocupen, Betty. -negó. - Se que necesitan arreglar algunas cosas y con tres niños en casa, bueno... Supongo que es difícil. -dijo algo divertida.
La rubia hizo una mueca y asintió, ambas soltaron una risita.
En eso Jughead bajó las escaleras junto a Cheryl.
- Ya los niños están dormidos. -explicó el pelinegro y tomó la maleta de la entrada. - Nos vemos el domingo chicas, si algo pasa nos llaman, ¿Si?
Ambas asintieron. - No te preocupes, Jug. -Cheryl le pidió abrazando a su novia. - Tu casa no va a arder.
- Eso espero. -el murmuró con una mueca y las tres chicas rieron.
Luego de despedirse de ambas chicas, la pareja salió de la casa, dejaron sus cosas en el maletero de la camioneta y subieron a esta, para así irse a la cabaña.
Al llegar, dejaron todo en su habitación y bajaron de nuevo.
- Bueno, no pedí que prepararan una cena porque quería hacerla yo mismo... -el admitió acercándose a su esposa.
Ella enarcó una ceja. - ¿Que harás?
- Una receta de mi madre, se que te va a gustar. -le guiñó un ojo. La tomó de la cintura y cerró sus ojos para acercarse a besar sus labios pero sintió un dedo en ellos.
Jughead abrió sus ojos y la miró confundido.
- No besos. -negó. - Que esté aquí contigo no significa que ya te haya perdonado.
- Bueno, yo se... Pero es uno solo. -pidió con un puchero. - No te beso desde hace días, porfi.
Ella rió. - Eres un manipulador. -dejó un casto beso en sus labios. - Y ese será el único hasta que te perdone. -sonrió con suficiencia.
- Bueno, es algo, supongo. -el pelinegro suspiró y la soltó para entrar a la cocina y comenzar a preparar la cena de ambos.
Betty fue al refrigerador, tomando una cerveza.
- Betts, no te embriagues. Debes amamantar a Marco. -la retó.
Betty bufó. - No siempre debo darle yo, pero tengo más de un año sin embriagarme. -se quejó señalándolo. - Y hoy que estamos sin niños, quiero aprovechar.
- Bueno, mamá rebelde entonces. -el se burló cuando Betty tomó un largo trago. - Pásame una entonces. -sonrió.
Ella abrió el refrigerador para tomar otra y dársela a su esposo. - ¿Sabes otra de las razones por las que te pedí celebrar nuestra boda luego del embarazo?
- ¿Por qué? -el preguntó luego de abrirla.
- Porque también quiero embriagarme. -sonrió de forma traviesa.
- Hablando de la boda... ¿Cuando comenzaremos con los preparativos? -el cuestionó mientras continuaba preparando la cena.
- Cuando dejes de cagarla. -la rubia se encogió de hombros caminando hasta la sala y encendió el televisor para poner música.
- Ja, ja. Muy divertida. -Jughead rodeó sus ojos fastidiado, pero sabía que ella lo decía en serio.
La música comenzó a sonar a todo volumen en los parlantes de la cabaña. One dance de Drake fue la canción que llenó los oídos de ambos.
Jughead sonrió mientras bebía otro trago de su cerveza, mirando a su esposa quién comenzó a bailar y saltar en la sala con la botella de cerveza en su mano derecha.
Le gustaba verla divertirse, escuchar su risa y ver su sonrisa.
- And that's why I need a one dance
Got a Hennessy in my hand. -ella cantó mirándolo.Jughead rió. - One more time 'fore I go
Higher powers taking a hold on me. -el la siguió.Betty continuó cantando sola, bajo la atenta mirada de su esposo, quien solo con mirarla feliz se conformaba.
Luego de compartir una deliciosa cena, un par de horas y muchas cervezas despues, ambos estaban en la sala bailando luego de que ella convención a su esposo.
El la tuvo de la cintura y sus miradas se conectaron.
Sus caras estaban a centímetros, y Jughead suspiró.
- Betts. -murmuró.
Lo cierto es que el no estaba tan ebrio, pero la rubia si, y tal vez estaba por hacer cosas de las que luego se iba a arrepentir.
- Vamos arriba. -ella le pidió parando de bailar.
Se acercó inesperadamente a él, tomándolo de la nuca para unir sus labios en un beso desesperado y el por inercia la acercó de la cintura apegando sus cuerpos.
Aunque sabía que la rubia en sus cinco sentidos no lo hubiera besado así, no podía siquiera intentar separarse despues de haber pasado días sin sentir sus labios contra los suyos de esa manera.
Al separarse, Betty comenzó a desabrochar los botones de la camisa de Jughead.
- Vamos Juggie... -ella pidió con necesidad. - Llévame arriba y hazme tuya, estamos solos...
Jughead lo consideró por un momento, pensando en cuánto el necesitaba aquello.
•
ESTÁS LEYENDO
Ballerinas | Bughead | +18
FanfictionEl destino se encarga de juntar a una hermosa pareja a través de sus hijas y tal vez un inconveniente sea solo el principio de una hermosa vida juntos. ¿Quién sabe? Jughead Jones y Elizabeth Cooper pueden ser unidos por el amor, y también... Por do...