Capítulo 178 "Juntos, juntos".

265 16 0
                                    

Dulce


- Pero ... ¿juntos, juntos? - repitió Giovanni con estupefacción, haciendo un impreciso gesto con ambos índices.

- Algo así – musitamos ambos a la vez.

- ¿Cómo que algo así? O si o no – dijo con convicción.

- Digamos que es como un periodo de prueba – traté de explicar, encogiéndome de hombros.

- ¿Pero qué tienen, una relación o una lavadora? - se quejó.

- Buena pregunta – rumió Poncho. Los fulminé con la mirada a los dos.

- Mira, eso es nuestra bronca, tú de momento cíñete al plan y no digas nada hasta que nosotros te digamos que puedes hacerlo ... ¿podrás mantener esa bocota cerrada? - le espeté con algo de desdén. Me miró con los ojos entrecerrados, aparentemente ofendido.

- Pues claro que puedo. Pero desde ya les digo que esto me parece un desastre.

- ¡GIOVANNI! ¿CÓMO SE TE OCURRE DEJARME SOLA CON LA SEÑORA VALENTE? UN POCO MÁS Y ME SECUESTRA, YA SABES LO QUE LE GUSTA HABLAR, Y SE SUPONE QUE TENÍAMOS UN PACTO DE SALVARNOS MUTUAMENTE EN CASO DE QUE ...

La perorata de Mai se detuvo un segundo, seguramente al ser consciente de la situación por detrás de su nube de ira. Giovanni estaba en un sofá, Poncho y yo en otro, e intercambiábamos miradas suspicaces, detectables hasta por el más despistado de los terrestres. Que seguramente no era otro que Giovanni, por otra parte.

- ¿Qué ha pasado? - preguntó, extrañada.

- Los he cachado amasando el pan – casi escupió Giovanni.

- ¿Qué? - replicó Mai, parpadeando convulsivamente.

- Quiere decir besándonos, pero en su propio idioma – explicó yo, con un deje de impaciencia en mi voz -. Y ahora iba a explicarnos porque le parece un desastre.

Si yo ya sabía que lo era, pero una cosa era que yo lo pensara y otra muy distinta que vinieran de fuera a decírtelo.

- ¿Por qué te parece un desastre? - repitió Mai, sentándose a su lado.

- ¿Pero no está claro? Cuando se acabe no van a volver a ser amigos como antes, será tensa la cosa y el grupo se irá a la . ¿No vieron lo que pasó con Aarón y Annie? ¡Pues peor!

- No sé porqué según tú, se tiene que acabar – intervino Poncho, cortante.

- Y en ese caso no sé porque no podríamos ser amigos de nuevo – añadí yo.

Mentira, mentira, mentira.

- ¿Me están choreando? - resopló Giovanni.

- Mira, creo que te estás estresando por nada, apenas si llevamos tres días, ni tiempo hemos tenido a pelearnos ... - inspiré profundo, tratando de no sonar malhumorada -, así que danos un tiempo antes de echarnos tierra y ponerle una lápida a esto, ¿quieres?

- Pues si pero ... ¡ah! ¡la obra! ¡tiene que besar a Derrick! - se dio cuenta, llevándose las manos a la cara con expresión bastante cómica -, ¿y a ti te parece bien? - preguntó a Poncho, con los ojos fuera de las órbitas, literalmente.

Y literalmente, no sé como le hice para no tirarle el jugo por encima.

- Lo llevo todo lo bien que puedo – dijo Poncho con la mandíbula apretada.

- ¿Podemos cambiar de tema por favor? - pedí, conteniendo mi genio a duras penas.

- Es cierto, ya que la maniobra de distracción no sirvió de nada y ustedes ya hablaron de lo de la obra ... ¿podemos retomar lo de Aarón y Annie? - intervino Mai.

Un Verano para RecordarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora