Cap 62: "La Caníbal"

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- No guey, tenemos que hablarle a Hollywood, de esto tienen que hacer, mínimo, una película – decía Aarón con total convencimiento.

Habíamos logrado salir ilesos de la batalla campal en la que se había convertido el salón de actos, y en ese momento nos encontrábamos fuera, en los jardines, asimilando lo que había ocurrido.

- Qué panda de locos – se rió Ximena. Menuda impresión se estaría formando de nosotros.

- Por eso adoro venir acá de vacaciones, uno sabe que nunca se va a aburrir – corroboró Annie, a quien se le habían saltado las lágrimas de la risa.

- Ey, ahí vienen los héroes – anunció Chris señalando con el dedo.

Y si, los demás alumnos los recibían como si de verdaderos héroes se tratasen. Los chavos del último año salieron en grupo, bromeando entre ellos y aparentemente orgullosísimos de su gran hazaña. Sonreí al ver como los demás los vitoreaban. Solo faltaba que empezaran a pedirle autógrafos. Mai, Dul y Giovanni se separaron del grupo para venir hacia nosotros, completamente felices. Se habían puesto ropa seca, pues al saber de que iba la cosa, habían podido prever que acabarían calados hasta los huesos, pero todavía tenían las cabezas completamente empapadas.

- ¿Qué onda? - saludaron los tres a la vez. Mai se veía algo cohibida, Giovanni estaba como si nada y Dul rebosaba satisfacción.

- ¿Quien fue el cerebro de la operación? - quiso saber Aarón.

- ¿Pues cómo que quien? Nuestra amiga la roja, ¿quien más? - anunció Giovanni sin disimular su admiración.

- Más que el cerebro yo diría la mente pervertida – seguía riéndose Chris.

- Ay ¿a poco no te gustó? - le preguntó Dul, insinuante.

- ¿Cómo no? Si hasta te perdono lo de la cerveza, con eso te lo digo todo – contestó Christian con vehemencia.

- Lo que no me puedo creer es que Mai se prestara a esto – añadió Annie mirando significativamente a Dul. Las viejas y sus códigos secretos.

- Pues a la muy mensa le daba pena, pero lo hizo increíble, además se veía super sexy, ¿no creen? - y aunque era una pregunta sin destinatario en especial, su mirada se centró en Chris.

- Y que lo digas, Maite quien te ha visto y quien te ve – ronroneó él.

Dul sonrió satisfecha mientras veía a Maite ruborizarse. Me estaba perdiendo de algo, casi seguro. Fruncí el entrecejo, confundido. Ximena me miró y negó disimuladamente con la cabeza. Por lo visto ella si se había dado cuenta de lo que estaba pasando, y al percatarse de mi confusión, puso su habitual cara de "¡Qué tarugo eres!".

Justo cuando Aarón estaba abriendo la boca, seguramente para deleitarnos con uno de sus comentarios de dudoso gusto, aparecieron Diego y Derrick, el primero ataviado con una camisa y el segundo, prácticamente como Tarzán, modales incluidos.

- ¿Qué onda? ¿Qué les pareció el show? - preguntó Diego. En honor a la verdad, no me había fijado demasiado en él, como era obvio.

- Sorprendente – admitió Annie. Ni por asomo se nos habría ocurrido a ninguno que las insinuaciones que llevábamos días escuchando se referían a esto.

- ¿Se fijaron en que linda se veía Mai? - añadió Diego, sonriéndole a la aludida.

- Si, si nos fijamos – respondió Giovanni con cierta brusquedad.

Lo miré sorprendido. Giovanni nunca tenía esas arrancadas, era la persona más afable que yo conocía, solo se ponía de mal humor cuando tenía que presentar un examen de matemáticas. Pude ver como Dul lo observaba de la misma forma que yo, cuando, sin previo aviso, sus pupilas se dilataron y su boca se abrió formando una pequeña o. No supe que había averiguado, pero a juzgar por su expresión, era el descubrimiento del siglo.

Un Verano para RecordarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora