Narra Alondra Ferreyra
David se levantó y se fueron con Carmen a la cocina a preparar de cenar. Yo permanecí en la sala, mi papá me volvió a abrazar haciendo con su ternura, que yo me rompiera en llanto de nuevo, lo extrañaba, era una parte de mí que quería estar a su lado, en el confiaba ciegamente, podía contarle todo lo que quisiera, siempre tenía una solución, muchas veces había sido mi cómplice y yo la de él, por eso me daba tanta rabia, que ya no podía estar tanto tiempo a su lado.
–Perdóname Alondra, no me cansaré en lo que me resta de vida de pedirte perdón. No entiendo ¿Qué fue lo que pudo detonar una reacción así en tu madre? Nunca te había pegado de este modo, ni a ti ni a ninguna de tus hermanas – Mi papá estaba muy afectado con la situación – Lamento tanto todo esto y todos los problemas, que indirectamente les hemos causado a Carmen y a David.
–Papi, no sé desde cuando estabas tú de viaje y no me haré ninguna inocente. Petra y yo discutimos, ella me fue a hacer un escándalo al Tec, porque alguien le informó que pasé la noche con David en un hotel y es la verdad, el viernes por la noche nos fuimos a celebrar que cumplíamos un mes de novios – Dije con seguridad – No veo porque Petra no quiere a David y además porque se pone así, yo nunca he sido la virgen María.
Mi padre estaba consiente de mi forma de ser y la respetaba, además yo no le ocultaba nada a él, si tenía duda en algo se lo consultaba, algo que no podía hacer con Petra, esa señora desde que nací, se convirtió en la bruja del cuento.
–Alondra tu madre es de ideas y de formas de ser tradicionales, pero no la justifico. Tú ya eres adulta y tomas tus propias decisiones y si tú decidiste ir y acostarte con David a ese hotel ese fue tu problema hija y ella no se puede meter más en tu vida. Otra cosa Alondra ¿Conoces a una mujer que se llama Dolores? – Me preguntó mi padre – Tú hermana Anastasia me dijo, que esa mujer es quién ha estado informando todo de ustedes dos a Petra y que el sábado le llevó estás fotografías impresas tuyas y de David, tanto entrando como saliendo del hotel ese fin de semana.
–Ese nombre me suena pero de momento no recuerdo, ¿No te dijo Anastasia una señal particular de esa mujer?
–Sí, me dijo que era una mujer muy mal vestida, dada a mostrar su cuerpo y que al parecer de tu hermana, no se trata de una persona de nuestro país por sus modismos para hablar – Dijo mi padre – Era una mujer ponzoñosa y por sus chismes, a la única que ha perjudicado ha sido a ti.
–No sólo a mí, a mis abuelitos les afectó esto que pasó pues Petra fue y me aventó a casa de ellos, como si de una basura me tratara. Ellos llamaron a un servicio médico para que fueran a curarme y no tenían ninguna necesidad de pasar por una angustia ni por un disgusto de ese tamaño – Le dije a mi papá – Ellos ya tienen que llevar una vida tranquila.
Mi abuelitos nada tenían que estar soportando los escándalos que hacia su hija, ellos ya estaban grandes y paz era lo que necesitaban.
–Así es Alondra, tu madre será lo que sea pero mis suegros siempre han sido un amor con todas ustedes, mis hijas. Hija, ¿Entonces no conoces a ninguna Dolores? – Volvió a preguntarme mi padre, entonces me vino a la mente, la mujer esa que vino a buscar a David – Si no la recuerdas no pasa nada, pero me preocupa que tengas esa clase de personas de enemigas, ya te ha hecho daño una vez y no quiero que vuelva a pasar.
Por mi mente pasó lo del hace días, lo que ocurrió a la salida de la casa de Carmen, esa mujer, la ex novia de David, tan conflictiva como ella sola.
–Ya recuerdo quién es papi. Es una ex novia de David, que vino a buscarlo aquí, no puedo creer que fuera capaz de tanto. Yo no la he tratado ni nada, pero ella sabe que David y yo estamos juntos, él mismo se lo aclaró cuando ella vino aquí a buscarlo.
–Ya que la has recordado, le pediré a David, que le ponga un alto a esa mujer. No quiero que nadie te vuelva a hacer daño y es por eso que quiero decirte hija que vas a vivir un tiempo aquí con David y con Carmen, ya lo he hablado con ella antes de que ustedes bajaran y no quiero que por ahora te acerques a la casa. Petra es muy peligrosa y ahora que enfrenta este proceso por la denuncia y lo demás, estará en un plan aún más destructivo.
–Te quiero mucho papi, gracias por dejarme quedar aquí. No le daré problemas a Carmen, ella si ha sido como una madre para mí – Dije con un poco de sentimiento – Lo que Petra jamás.
Mi papá estaba a punto de decir algo, cuando David y Carmen llevaron la cena a la mesa del comedor. Nos fuimos a cenar para sentarnos y a pesar de que traté de no sacar lo de esa maldita de Dolores, algo dentro de mí provocó que lo hiciera justo en ese momento.
–David, mi amor. Mi papi me acaba de decir, que quién le dio información de nosotros a Petra, fue Dolores esa mujer que vino a buscarte – Solté así de golpe – Necesitas ponerle un alto, yo no le he hecho nada y creo que tú tampoco.
–Coincido con Alondra hijo – Intervino Carmen –Esa mujer ha llegado muy lejos esta vez, Petra pudo matar a Alondra, por sus tonterías de no saber perder. Así que o le pones el alto tú David, de que se aleje de tu vida o ya se lo pondré yo.
–Claro que sí madre. Quédense todos tranquilos que yo, le pondré un alto a Lola. Para mí lo primero, siempre será el bienestar de mi princesa.
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Mi Consentida
RomanceAlondra ha sido mía desde el primer momento que la vi, los libros hablan sobre chispas en el aire, cuando se encuentran dos almas gemelas, lo nuestro fueron luces de bengalas, luminosas, mostrándonos lo peligroso que podemos ser si nos acercamos lo...